Un tribunal de Jerusalén condenó este martes a cadena perpetua al principal acusado israelí por el asesinato de un palestino quemado vivo en 2014, crimen que contribuyó a la escalada de la violencia que condujo a la guerra de Gaza.
Yosef Haim Ben David, judío de 31 años, era el principal acusado en un proceso por secuestro y asesinato de un palestino de 16 años, Mohamed Abu Jdeir, el 2 de julio de 2014 en Jerusalén-Este, parte palestina de la Jerusalén anexada y ocupada por Israel. El crimen conmocionó profundamente a la opinión palestina.
Además de la perpetuidad, el tribunal condenó a Yosef Haim Ben David a 20 años suplementarios, sin precisar exactamente a qué correspondía esta pena.
Antes, el fiscal Uri Korb había pedido al tribunal condenar al acusado, además de a prisión perpetua por el asesinato de Mohamed Abu Jdeir, a 20 años por su secuestro, a 12 por un intento frustrado de secuestrar a otro palestino el día anterior, y tres años por incendios criminales contra bienes palestinos.
La familia de la víctima expresó su furia contra el acusado cuando se pronunció el veredicto, insultándolo y reclamando su muerte.
La cadena perpetua es la pena más dura que puede aplicar un tribunal en Israel. Fuera de crímenes específicos como de guerra o traición, la pena de muerte está abolida por asesinato desde 1954.
Dos cómplices de Ben David originarios de familias ultraortodoxas judías y menores en el momento de los hechos, fueron condenados, uno a perpetuidad y otro a 21 años de cárcel el 4 de febrero por el mismo tribunal.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios