DETENIDOS EN CANARIAS 12 COMERCIANTES POR ESTAFAR A TURISTAS CON COBROS FRAUDULENTOS EN SUS TARJETAS

La Policía Nacional ha detenido en Gran Canaria a 12 personas que regentaban establecimientos dedicados a la venta de productos electrónicos y que estafaron más de 400.000 euros a turistas extranjeros, algo que llevaban a cabo con cobros fraudulentos en sus tarjetas de crédito.
Según informó la Policía, los arrestados hacían los cargos ocultos en las tarjetas justo antes de que los turistas volviesen a sus países, lo que dificultaba las reclamaciones. Por este procedimiento llegaron a estafar 436.781 euros de los 893.487 de los que intentaron apropiarse.
En el registro de los locales donde se desarrollaba esta actividad y en el domicilio del principal implicado se intervinieron ocho datáfonos o TPVs para el pago con tarjeta, diversas joyas, relojes y 22.000 euros en efectivo.
El procedimiento de actuación de los arrestados consistía en abordar en las inmediaciones de sus comercios a personas de avanzada edad y de otros países que se encontraban de vacaciones en España y les ofrecían dispositivos electrónicos a precios muy reducidos.
FALSAS ACTUALIZACIONES
Sin embargo, no les entregaban el producto en el momento, sino que con la excusa de realizar actualizaciones, daban a los clientes lo comprado el mismo día del vuelo de regreso. Eso servía a los investigados para realizar en ese momento varios cobros fraudulentos en la tarjeta de los estafados, que ya no podrían reclamar por encontrarse fuera de España.
La investigación comenzó tras una denuncia de una entidad colaboradora que detectó anomalías en los cobros realizados a través de los dispositivos para pagar con tarjetas de crédito (TPVs).
Se averiguó entonces que los 12 detenidos, miembros de una organización criminal, regentaban tiendas de productos electrónicos y escogían como víctimas a turistas extranjeros de avanzada edad, a los que ofrecían dispositivos a un precio muy por debajo del de mercado. Por ejemplo ofertaban tabletas de 300 euros a 60.
Cuando el cliente entraba en el establecimiento le indicaban que debían realizar actualizaciones o modificaciones en el aparato y que le harían entrega del mismo el día en que regresara a su país. En ocasiones incluso se ofrecían a recogerlos en su hotel y trasladarlos a la tienda para hacerles entrega de la mercancía.