Autoridades de la provincia de Buenos Aires, la más poblada de Argentina, denunciaron el miércoles sendos ataques a una vivienda oficial y a la oficina de la gobernadora María Eugenia Vidal, figura clave del gobierno de Mauricio Macri, que atribuyeron a un posible acto de intimidación.
"No podemos descartar que sea un acto intimidatorio. No podemos descartar nada, lamentablemente", declaró a la prensa el ministro de Gobierno de la provincia, Federico Salvai.
Desconocidos ingresaron la noche del martes a la casa donde reside Salvai durante la semana en La Plata, capital provincial, 60 km al sur de Buenos Aires, y revolvieron todo sin llevarse nada.
"Los delincuentes violentaron todas las puertas menos la del dormitorio. Me llamó la atención que no hayan entrado al dormitorio y que no se hayan llevado nada. Tengo una computadora, un televisor, electrodomésticos en casa", advirtió el funcionario.
Comentó que "es algo muy raro. No se han llevado nada. Se han encargado de dar vuelta la casa".
"También nos llamó la atención cuando entraron al despacho de la gobernadora" María Eugenia Vidal, agregó.
Este hecho se suma a otro sucedido hace dos semanas cuando dos efectivos de la policía bonaerense (dependiente del gobierno provincial) que debían custodiar la puerta del despacho de Vidal fueron descubiertos mientras revisaban cajones del escritorio de su secretaria privada.
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