Destrozan un coche policial en Melilla y roban una escopeta policial y el sistema de transmisiones en la Cañada

Según ha podido saber Europa Press, en el momento en el que los dos agentes del GAC (Grupo de Atención el Ciudadano) salieron del coche para poder hacer frente a la agresión en este barrio de casi por cien habitantes de confesión musulmana y refugiarse como podían mientras pedían ayudan a otras unidades, los agresores robaron del coche una escopeta policial del calibre 12-70 y un sistema de transmisión para comunicaciones.

Los dos policías resultaron ilesos después de ser socorridos por otras unidades de la Policía Nacional, Guardia Civil y Policía Local, mientras su vehículo tuvo que ser retirado por una grúa debido a los daños sufridos.

Los hechos ocurrieron el domingo por la tarde-noche. Una llamada al 091 para denunciar el robo de una motocicleta, que finalmente fue recuperada, fue el origen de nuevo altercado en la Cañada.

Las piedras lanzadas desde zonas altas, al parecer desde azoteas y otros lugares, fueron constantes hasta el punto de romper lunas delanteras y laterales, así como provocar importantes bolladuras en el vehículo.

Según han explicado a Europa Press fuentes policiales, los dos agentes que se encontraban en su interior tuvieron que salir para hacer frente a la agresión y solicitar ayuda a otras unidades. Los agresores aprovecharon ese momento, en el que los policías nacionales buscaron refugio para salvar la integridad física, para robarles una escopeta 'Franchi' del calibre 12-70 que se hallaba en el interior del coche policial y un sistema de transmisión para comunicaciones verbales.

Las fuentes oficiales no han podido confirmar si se han producido disparos y han señalado que será la Policía Científica, tras analizar el vehículo, la que podrá determinar si ha tenido lugar este tipo de agresión.

El portavoz policial ha indicado que no se han producido heridos aunque sí daños materiales importantes en el vehículo-zeta, que incluso presentaba las ruedas pinchadas, motivo por el que fue trasladado en una grúa. Asimismo, ha admitido que de momento no hay detenciones aunque ha avanzado que se han iniciado las investigaciones para dar con los autores de esta agresión.

El presidente de la Cuidad y el delegado del Gobierno, Juan José Imbroda y Abdelmalik El Barkani respectivamente, así como los sindicatos de la Policía Nacional, han condenado la agresión y mostrado su solidaridad con los agentes.