La investigación comenzó tras la denuncia de un familiar de la víctima, que manifestaba que este hombre de 46 años, tenía una discapacidad intelectual moderada (minusvalía del 67 por ciento) y que, "sin ser consciente de lo que hacía, había firmado una hipoteca a su nombre para la adquisición de una vivienda que figuraba a nombre de otra persona".
Tras llevar a cabo una serie de gestiones, los agentes de la Policía Nacional comprobaron que esta persona había solicitado un préstamo hipotecario, junto con una amiga, y era ella la beneficiaria, ya que "el domicilio que pretendía pagar con la hipoteca estaba a su nombre".
En la denuncia se aportaron varios informes médicos que expresamente reflejaban que la víctima "presenta un déficit en habilidades económicas, jurídicas y administrativas", además de "dificultades en capacidades contractuales y en la determinación del alcance de préstamos", señala la Policía Nacional en nota de prensa.
La investigación continuó hasta localizar a la mujer beneficiaria del préstamo mencionado, una presunta amiga de la víctima, que fue detenida por un delito de estafa.
Se trata de una joven de 25 años que fue trasladada a dependencias policiales a fin de tramitar el correspondiente atestado.
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