En un comunicado, la Jefatura Superior de Policía de Madrid ha explicado que el detenido, que responde a las iniciales C.K.J, contactó con una mujer para que actuase como intermediaria y concertará una reunión con miembros de la joyería y un experto simulando interés por adquirir joyas preciosas y efectos de gran valor.
El detenido que era el supuesto comprador amenazó con un arma y maniató a los presentes para hacerse con el botín. La investigación se inició a raíz de la denuncia presentada por las víctimas. Tras numerosas pesquisas los agentes lograron localizar y detener al delincuente gracias a las descripciones aportadas por las víctimas.
MANIATADOS
El robo tuvo lugar en un despacho profesional de Madrid, donde iba a tener lugar una supuesta operación de compra-venta de diamantes. En el despacho se encontraban el fingido comprador, un gemólogo, un representante de joyería y la mujer que hacia labores de mediación.
Fue en el trascurso de la venta cuando el comprador sacó una pistola con la que amenazó al joyero, para seguidamente maniatar a todos los presentes con bridas y ordenar que se tirasen al suelo. El delincuente sustrajo tres diamantes, dos relojes Rolex y otros efectos valorados en 550.000 euros.
La investigación ha sido llevada a cabo por agentes de la Brigada Provincial de Policía Judicial, perteneciente a la Jefatura Superior de Policía de Madrid
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