Seis talibanes condenados a muerte fueron ahorcados el domingo, informaron fuentes del gobierno de Afganistán, en la primera tanda de ejecuciones aprobada por el presidente Ashraf Ghani desde su llegada al poder en 2014.
"Conforme a la constitución afgana, (el presidente) Ghani aprobó la ejecución de seis terroristas que cometieron graves crímenes contra civiles y contra la seguridad pública", anunciaron desde el palacio presidencial a través de un comunicado.
Una fuente gubernamental precisó que los seis condenados eran talibanes.
El presidente afgano prometió en abril una dura respuesta militar contra los talibanes y la aplicación de condenas severas contra los insurgentes, incluyendo la pena de muerte.
"El tiempo de la amnistía ha terminado", dijo poco después de que se produjera un atentado reivindicado por los talibanes contra un edificio oficial de Kabul que dejó al menos 64 muertos.
Los talibanes habían anunciado unos días antes el comienzo de su "ofensiva de primavera", lanzando un asalto en Kunduz (norte).
Las negociaciones de paz, que Kabul trató de reanudar en los últimos meses con el respaldo de China y Estados Unidos, parecen estar en punto muerto, mientras los insurgentes exigen la salida de las tropas extranjeras como condición previa para retomar el diálogo.
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