"El Gobierno de España condena en los términos más enérgicos el ataque terrorista" y denuncia que "la crueldad de los terroristas queda una vez más de manifiesto cuando su objetivo son civiles que participaban en un evento deportivo", según un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación.
El Ejecutivo aprovecha para trasladar sus condolencias a los familiares y allegados de las víctimas y desea una pronta recuperación a los heridos. Además, expresa su solidaridad con las autoridades y el pueblo iraquíes y su "compromiso en la lucha contra la barbarie terrorista".
Entre los fallecidos hay menores de edad, algunos de hasta diez años, y también estaría el alcalde de la localidad, Ahmed Shaker. Además, se ha difundido lo que parece ser el momento del atentado, cuando un hombre habla junto a una mesa con trofeos llamando a uno de los jugadores. Entonces se produce una gran explosión y un fogonazo amarillo.
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