Así, solicita que se revoque la resolución y se investiguen los hechos ocurridos --que la CUP niega--, como señala en el recurso consultado por Europa Press, en el que ha destaca que el hecho de que Garganté fuera acompañado y que pidiera al médico cambiar un documento oficial.
Ha resaltado que este hecho podría haber constituido un delito de falsedad en documento oficial cuando, además, insistía ante un "funcionario público en el desarrollo de sus funciones", y ha destacado que aprovechó la presencia de un grupo numeroso.
Además, ha señalado que estuvo acompañado por un grupo de unes diez personas en un lugar "sensible y cuyo funcionamiento puede verse afectado" --el área de urgencias del centro Perecamps--, algo que incrementó la presión, según el Fiscal.
"SUSCEPTIBLE DE INTIMIDAR"
Sostiene que no puede obviarse el hecho de que Garganté acudiera junto a una decena de personas, porque supone un incremento de la presión: "Es evidente que un grupo, por mucho que se limite a reforzar con su presencia a un portavoz, resulta un elemento susceptible de intimidar".
Los hechos ocurrieron la tarde del 23 de marzo, cuando la Urbana realizó un dispositivo de disuasión de la venta ambulante en la zona de la estación de Metro de Drassanes, y Modou B. resultó herido en la dispersión de varios 'manteros'.
El 'mantero' fue trasladado al centro sanitario Peracamps, donde fue atendido por un médico, cuyo informe determinó que las lesiones eran fruto de una caída, tras lo que se presentó Garganté para pedir que volviera a examinar al 'mantero'.
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