El Fondo Mallorquín apuesta por la colaboración entre municipios para mejorar la solidaridad con los refugiados

En este sentido, el conseller de Participación Ciudadana y Presidencia del Consell y vicepresidente del Fondo Mallorquín, Jesús Jurado, ha apostado por la cooperación municipalista a raíz de la experiencia de Mallorca con Quios, que demostró que "es la mejor manera de que la solidaridad llegue a todos los agentes implicados, tanto refugiados como las entidades locales que afrontan la problemática desde primera línea."

En estas jornadas, además, se pretendía profundizar sobre las causas e interdependencias en el área Mediterránea, además de mostrar alguno de los objetivos del desarrollo sostenible ante estos socios, que son los 53 ayuntamientos de Mallorca, las mancomunidades del Pla y del Raiguer, el Consell insular, Govern, la Universitat de les Illes Balears (UIB) y Justícia i Pau.

Esta formación se ha realizado tras la demanda por parte de los socios de más información sobre la acogida e integración de personas refugiadas, según el Consell.

Por su parte, la representante de Acnur-España, Friz-Prguda, ha comenzado las intervenciones con una explicación de la situación de los refugiados, especialmente en la zona mediterránea y ha dado ejemplos de experiencias de administraciones públicas sobre la acogida e integración de los refugiados que han tenido que abandonar su país por causas diversas como la guerra, la hambre, el cambio climático, entre otras situaciones.

Mientras, la representante de la Asociación Europea por la Democracia Local (ALDA), Nikos Gamouras, y la técnica de cooperación para el desarrollo de la Diputación de Barcelona, Margalida Barceló, han dado su visión y expuesto su experiencia sobre la cooperación entre autoridades locales.

Los municipios que desarrollen este tipo de cooperación tendrán que hacer un trabajo previo de sensibilización y comunicación con sus habitantes para que entiendan lo que significa llevar a cabo proyectos de cooperación conjuntamente con los municipios que actualmente están recibiendo la mayoría de refugiados por su proximidad al conflicto.

Concretamente, se trata de ayudar en la gestión pública de los recursos para poder asumir el crecimiento de la población y mejorar la convivencia de la población local y la refugiada.

También se ha incidido en el enfoque hacia la cooperación técnica, que significa ceder, durante un tiempo, personal técnico de la institución para poder iniciar, desarrollar o mantener alguno de los proyectos, ha explicado la institución insular.