Ha argumentado que es una previsión que puede variar, pero que rondará el 1% y habrá gasto no financiado y por tanto no pagado, porque a pesar de que la ejecución presupuestaria de 2016 es mejor que la de 2015, en los meses finales del año se concentran una parte importante de los pagos.
Ha explicado que, a diferencia de otras prórrogas presupuestarias de año completo, este 2016 hay un contexto diferente, en el que "aumentan los ingresos tímidamente y se reducen los costes" por la caída de tipos de interés, por lo que hay más margen que ha permitido incrementar un 1% el salario de los empleados públicos y recuperar parte de la paga extra recortada en 2012.
(HABRÁ AMPLIACIÓN)
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