Los hechos se produjo de madrugada después de que los agentes recibieran una llamada, a las 23.30 horas, de un particular, propietario de invernaderos en esa zona, que identificó un vehículo, tipo furgoneta, haciendo maniobras extrañas y dando vueltas a los invernaderos con las luces apagadas.
La patrulla de Policía, que se encontraba por la zona, se presentó tres minutos después en la zona, donde localizó el coche que seguía merodeando con las luces apagadas, y procedió a la identificación de sus ocupantes, han explicado las mismas fuentes.
Mientras, el propietario de la finca descubría 32 sacos llenos de pimientos preparados en el exterior de un invernadero, así como varios daños materiales, que cuantificó en unos 1.200 euros.
Durante la inspección del vehículo, los agentes descubrieron en el interior del mismo había cinco sacos, idénticos a los que aguardaban llenos de pimientos fuera del invernadero, y restos de suciedad y tierra en la ropa de los ocupantes del vehículo.
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