"Es el asunto más grave en Río y el estado está haciendo un trabajo terrible, horrible", ha lamentado Paes en una entrevista con la cadena estadounidense CNN. Según el edil, las autoridades "están fracasando completamente en su labor de vigilancia y de cuidar de la población".
El Gobierno de Río de Janeiro, al que compete el control de la Policía Militar, solicitó fondos de emergencia a la Administración federal para atender necesidades asociadas a los Juegos, que comenzarán el 5 de agosto. El llamamiento fue respondido la semana pasada con unos 2.900 millones de reales (algo más de 800 millones de euros).
Paes ha celebrado que, "afortunadamente", las autoridades estatales "no serán las responsables de la seguridad" durante el tiempo que duren los Juegos. "El Ejército, la Marina, todos van a estar aquí", ha aplaudido.
ZIKA
A la inseguridad en las calles se ha sumado también el miedo al contagio del zika, un virus que está asociado a malformaciones fetales y que ha llevado incluso a algunos deportistas a poner en duda su presencia en la cita.
El alcalde de Río ha asegurado que se están "exagerando" los efectos que el zika podría tener para los Juegos y ha recordado que el riesgo de transmisión se reduce ahora que es invierno en Brasil. "Hay más casos de zika en Florida que en Río", ha asegurado.
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