Un juez federal estadounidense enmendó una ley en vigor en Washington que restringe el porte individual de armas, en lo que es una victoria para los militantes de la autodefensa consagrada en Segunda Enmienda de la Constitución de Estados Unidos.
La capital ha tenido una de las legislaciones más duras del país para la circulación de armas, ya que se debe contar con un permiso para portar un arma fuera del domicilio. Así pues, el portador debe así dar "una buena razón" para llevarla.
Pero el juez Richard Leon, en su fallo de 46 páginas conocido por la AFP, estimó que la cláusula de la "buena razón" es "muy probablemente inconstitucional" ya que, escribe, "el derecho al porte incluye el derecho de llevar un arma para su autodefensa en su casa o fuera de ella".
En consecuencia, el juez ordenó al Distrito de Columbia (que alberga a la capital federal Washington) otorgar los permisos de porte sin tener en cuenta la mencionada cláusula.
El número de personas que podrían empezar a portar armas es desconocido, sobre todo porque las autoridades de la capital podrían recurrir la decisión. Sea cual sea el desenlace de esta batalla judicial, el permiso para portar armas en Washington exige que éstas sean disimuladas en la ropa, en un bolso o en la guantera del vehículo.
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