La abogada del joven, Ana Belén Ordóñez, del bufete Ley 57, ha anunciado para los próximos días la presentación de la demanda de reclamación patrimonial por los daños ocasionados a su cliente tras su estancia en prisión.
Las secuelas, según ha señalado la letrada, a través de un comunicado, "le han obligado a someterse a tratamiento psiquiátrico, además de haber perdido los estudios iniciados".
Ordóñez ha recordado que el joven fue absuelto gracias a las declaraciones de varios testigos, "que acreditaron que no existió violencia o intimidación sobre la supuesta víctima a la hora de mantener relaciones sexuales".
Los hechos se produjeron el 25 de abril de 2015 en un establecimiento de Alhaurín el Grande (Málaga), donde el acusado y un amigo entablaron conversación con dos chicas suecas. Según la sentencia de la Audiencia Provincial de Málaga, el tono de esa conversación fue amigable e incluso llegaron a besarse y a acariciarse.
La pareja abandonó posteriormente el local y mantuvo relaciones en plena calle. Algunos testigos declararon ante el tribunal que no observaron que la joven fuera forzada por el acusado, según la sentencia, en la que se señala que no consta que existiera violencia o intimidación por parte del acusado.
El tribunal no ha encontrado elementos de prueba determinantes para condenar al acusado y ha optado por defender su derecho a la presunción de inocencia, según han asegurado. Además de absolverle, la Sala ha ordenado que se le devuelva la fianza de 1.500 euros que depositó para salir de prisión.
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