Aceleran negociaciones para terminar huelga de policías antes del carnaval

Brasilia, 7 feb.- Las autoridades del estado brasileño de Bahía aceleraron hoy las negociaciones con los policías en huelga desde hace una semana para tratar de poner fin a la paralización antes del carnaval, una fiesta que atrae decenas de miles de turistas a Salvador, la capital regional.

Los representantes del Gobierno regional tuvieron entre la noche del lunes y la mañana de este martes "intensas y productivas" negociaciones con los líderes de la huelga, que están atrincherados con algunos familiares en la sede de la Asamblea Legislativa de Bahía en Salvador, informó la asesoría de prensa de la gobernación.

El propio gobernador de Bahía, Jaques Wagner, aseguró en declaraciones a diferentes canales de televisión que un acuerdo está próximo y que la población del estado y los turistas podrán disfrutar el carnaval en paz.

"Mis esfuerzos están concentrados en hacer propuestas consistentes para que podamos terminar con ese movimiento en las próximas horas", afirmó el gobernador, perteneciente al oficialista Partido de los Trabajadores (PT).

"Tengo mucha experiencia en negociaciones y puedo decir que una que dura diez horas está en buen camino", agregó Wagner, quien comenzó su carrera política como líder sindical.

La huelga preocupa a las autoridades no sólo por el aumento de la inseguridad sino también por el posible impacto económico que puede tener en Salvador, ciudad que espera a decenas de miles de turistas para el carnaval que comenzará dentro de diez días.

Salvador es, además, uno de los principales destinos turísticos de Brasil y una de las sedes del Mundial de fútbol de 2014.

"El carnaval se acerca y tengo la convicción de que llegaremos a un acuerdo", afirmó el gobernador al admitir el temor de que la huelga espante a los turistas y afecte las presentaciones artísticas de estas fechas, algunas de las cuales ya fueron suspendidas.

Salvador, tercera mayor ciudad de Brasil y con unas fiestas que disputan en popularidad a las de Río de Janeiro, espera tres millones de personas para el Carnaval que en esa ciudad comienza el 16 de febrero.

Las negociaciones con los huelguistas, que reivindican un aumento salarial de cerca del 30 por ciento y mejorías en las condiciones de trabajo, son mediadas por el arzobispo de Salvador, Murilo Krieger.

Pese a que el gobernador se negaba inicialmente a negociar con los huelguistas, a los que acusaba de actos de vandalismo y de haber promovido ataques criminales, ha suavizado su postura ante el agravamiento de la situación de orden público en Bahía, en donde se han registrado cerca de un centenar de homicidios en una semana.

Poco después de haber dicho que el presupuesto no permite un aumento salarial este año, Wagner aseguró que es posible programar un incremento gradual de los sueldos entre 2012 y 2015, pero aún no aclaró qué porcentaje está dispuesto a conceder luego de que los huelguistas rechazaran el 6,5 por ciento inicialmente ofrecido.

Las negociaciones dependen ahora de un acuerdo en torno a la amnistía reivindicada por los policías parados.

Ello debido a que el gobernador aseguró que no sancionará a quienes participaron en la huelga de forma pacífica pero sí a los que promovieron actos vandálicos.

Wagner no ha aclarado si la amnistía beneficiará a los doce líderes de la huelga, contra los que fueron expedidos órdenes de detención debido a que la justicia declaró ilegal la paralización.

Además del alto número de asesinatos, en Bahía se han registrado saqueos, asaltos y actos de vandalismo, que tienen a la población aterrorizada y a parte del comercio y a las escuelas cerradas.

La seguridad de Bahía ha sido reforzada con cerca de 3.000 miembros del Ejército y de la Fuerza Nacional de Seguridad procedentes de otros estados.

Parte de los militares tiene cercada desde ayer la sede de la Asamblea Legislativa de Bahía, en donde un número desconocido de huelguistas está atrincherado desde el martes de la semana pasada con algunos familiares.

Los alrededores de la Asamblea fueron escenario el lunes de escaramuzas entre los militares que rodean el inmueble y familiares y partidarios de los huelguistas, que quisieron romper el cerco para ingresar en el lugar.

El ambiente hoy estaba menos caldeado y los partidarios de los huelguistas hasta le festejaron, con pastel incluido, el 62 cumpleaños al general Marco Gonçalves Dias, comandante de la tropa enviada a Salvador para restaurar el orden.