Afganistán. La bomba del último atentado tenía 30 kilos de explosivos, la mayor en nueve años contra las tropas españolas


La bomba que el pasado 26 de junio segó la vida de dos soldados españoles destinados a la misión de la OTAN en Afganistán contenía 30 kilos de explosivos, lo que la convierte en la mayor que se ha puesto contra las fuerzas españolas en nueve años de permanencia allí.
Así lo reveló hoy la ministra de Defensa, Carme Chacón, en su comparecencia a petición propia ante la Comisión del ramo del Congreso de los Diputados para informar del atentado, que causó la muerte de dos militares españoles y heridas a otros tres. Chacón comparó la envergadura de este explosivo con el que estalló el 18 de junio provocando la amputación de una pierna a dos de los efectivos desplegados allí, que contenía 20 kilos.
La ministra quiso recordar, no obstante, que desde hace 15 meses todos los militares españoles en Afganistán se desplazan en blindados de última generación, con la máxima tecnología disponible en el mercado: 145 Linces y 74 RG31, que hasta ahora habían evitado las muertes que podían haber provocado los seis atentados sufridos por las fuerzas españolas. Chacón aseguró que el Gobierno no va a escatimar esfuerzos en dar la máxima seguridad a los militares, pero reconoció que "por muy elevada que sea la protección, siempre existirá riesgo".
Según explicó, los dos militares fallecidos ocupaban los asientos del lado derecho del vehículo, donde estalló la bomba, activada a 20 kilómetros de distancia. El blindado era el primero de un convoy que constaba de siete: tres Linces y cuatro RG31.
El atentado se produjo hacia las 9.30 horas, en una de las vías de transporte que, según relató la ministra, hace un año estaban ocupadas por la insurgencia y ahora son utilizadas para el transporte de mercancías; algo contra lo que se rebelan los guerrilleros con este tipo de atentados, precisamente porque se les está "cercando".
Chacón aseguró que el Gobierno sabe cuáles de los grupos insurgentes presentes en la zona tienen capacidad para cometerlos, y que no escatimará esfuerzos hasta localizar y detener a los culpables directos. Por último, la ministra informó también de que el pasado viernes visitó en el Hospital Central de la Defensa Gómez Ulla de Madrid a los heridos de los dos atentados de junio que permanecen ingresados allí.

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