Aimaras retienen por horas a 3 funcionarios para exigir proyectos a Morales

  • Indígenas aimaras de Bolivia retuvieron hoy por más de cuatro horas a una ministra y a un gobernador y un senador oficialistas en una avenida de la ciudad de El Alto, vecina de La Paz, para exigir una negociación con el presidente Evo Morales por proyectos de desarrollo para su región.

La Paz, 12 sep.- Indígenas aimaras de Bolivia retuvieron hoy por más de cuatro horas a una ministra y a un gobernador y un senador oficialistas en una avenida de la ciudad de El Alto, vecina de La Paz, para exigir una negociación con el presidente Evo Morales por proyectos de desarrollo para su región.

Decenas de los llamados "Ponchos Rojos", un grupo radical indígena, retuvieron desde la tarde a la ministra de Desarrollo Productivo, Teresa Morales; al gobernador de La Paz, César Cocarico, y al senador Eugenio Rojas en una avenida de El Alto, según mostraron canales de televisión locales.

Las autoridades y el parlamentario fueron a encontrarse con ellos para dialogar sobre sus demandas, pero los indígenas decidieron no dejarlos abandonar el lugar hasta que el presidente Morales se presentara allí.

Finalmente, los indígenas aceptaron dialogar con el ministro de Gobierno, Carlos Romero, que llegó hasta el lugar con custodia policial y los persuadió de trasladar la reunión a la Universidad Pública de El Alto.

En la reunión, que se sigue efectuando en este momento, también participan Teresa Morales, Cocarico y Rojas, según confirmó a Efe una fuente del Ministerio de Desarrollo Productivo.

Los nativos marcharon durante tres días desde el pueblo andino de Achacachi, a 96 kilómetros de La Paz, hasta El Alto, para exigir la destitución de la ministra Morales y de su par de Desarrollo Rural, Nemesia Achacollo, a quienes acusan de incumplir proyectos de desarrollo para su zona.

Un dirigente de los "Ponchos Rojos", Simeón Jaliri, explicó a los medios que también protestan por la decisión de Estados Unidos de rechazar la solicitud de extradición del expresidente boliviano Gonzalo Sánchez de Lozada, acusado de la muerte de 60 personas en una revuelta social en 2003.

Los indígenas rechazan además la intervención de una cooperativa distribuidora de electricidad en el altiplano de La Paz porque aseguran que el Gobierno no les consultó para tomar esa decisión.

La toma de rehenes es una medida de presión frecuente por parte de sectores sociales cuando quieren atención inmediata del Gobierno para sus demandas.

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