"Mi hija de 6 años: "Mamá, el traje de Gaspar no es de verdad." No te lo perdonaré jamás, Manuela Carmena. Jamás.", escribía en Twitter Cayetana Álvarez de Toledo, portavoz de la plataforma Libres e Iguales y directora de Área Internacional de la fundación FAES.
Pocos minutos después, el "no te lo perdonaré jamás" que la ex dirigente del PP dedicó a Carmena por estropearle la víspera de Reyes a su hija dio lugar a toda clase de ingeniosas respuestas mofándose de la dirigente popular.
Hoy, Álvarez de Toledoresponde en una columna en El Mundo a las críticas.
"La noche del 5 de enero escribí un tuit sobre la ridícula cabalgata de Reyes organizada por el Ayuntamiento de Madrid. Más de 11.600 retuits a esta tierna hora de la tarde en la que escribo, más de 7.000 corazoncitos pulsados por deditos amables, no sé cuántos comentarios, chistes, insultos y memes, hashtag propio, vigoroso y viral, trending topic durante horas, comentarios en los principales programas de radio y televisión, referencias en varios telediarios, y, lo más asombroso, un eco transversal en la llamada prensa de calidad", arranca.
Lejos de amilanarse con la repercusión de su tuit, califica el fenómeno de "interesantísimo". Eso sí, porque le ha permitido ver con claridad, dice, que "Twitter es un vertedero, la tumba de la inteligencia"
"No me refiero únicamente a los comandos organizados que alimentan los circuitos del odio durante horas sin descanso", explica. "Toda operación revolucionaria necesita soldados rasos suficientemente ignorantes y entregados como para perder la vida, que hoy es el tiempo, en estériles maniobras de acoso y derribo. Y nuestros chavistas ibéricos cuentan con un ejército", ataca."El que lee 'chica del PP' entiende 'corrupta'"
El problema fundamental, para Álvarez de Toledo, son los prejuicios que hacen que sus palabras hayan sido interpretadas en función de su ideología política.
"El que lee "chica del PP" y entiende: corrupta, facha y pija. Odia a los pobres (quería estar en la tribuna VIP), detesta a los gais (de ahí sus críticas a la túnica rosa de Gaspar), aborrece a los negros (a los que nosotros, paradójicamente, ponemos a tocar una kora africana en plena Era Obama) y desprecia a las mujeres (porque el auto odio no es patrimonio exclusivo del constitucionalista catalán). Ah, y, por supuesto, es una integrista religiosa, porque para qué preguntar si cree mucho, poquito o nada", ironiza.
La directiva de Faes considera asimismo que sus palabras se han exagerado y que, a pesar de que no le ha gustado la cabalgata, el contenido del tuit era claramente irónico. "Estos días me han preguntado, con toda seriedad, qué tal está mi hija y si algún día lograré perdonar a Carmena. Por no hablar del delirio al que han llegado algunos sabuesos digitales, que detectan una conspiración política de gran alcance orquestada desde Faes", se lamenta.
Para Cayetana Álvarez de Toledo, sin embargo, la conclusión es clara: "Con estos tontos no hay nada que hacer".
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