Argentina acusa a EEUU de ocultar al espía Stiuso, fuente del fallecido fiscal Nisman

    • El espía era conocido al ser acusado de la filtración a la prensa de la fotografía de Ross Newald, ex jefe de la estación de la CIA en Argentina.
    • Ahora se le busca por su relación con el fiscal Alberto Nisman, muerto en extrañas circunstancias mientras investigaba el atentado contra la sede de la AMIA en 1994.
Una de las escasas fotos del espía Stiuso publicada por la revista Noticias
Una de las escasas fotos del espía Stiuso publicada por la revista Noticias

El Gobierno de Argentina ha exigido al de Estados Unidos que le facilite toda la información que tenga acerca del paradero del agente de inteligencia Antonio Stiuso, buscado en relación con la misteriosa muerte del fiscal Alberto Nisman, el pasado enero.

El espía argentino Antonio Stiuso, ex jefe de Operaciones de la Secretaría de Inteligencia, también se ha hecho llamar Horacio Stiusso, Jaime Stiles, Horacio Stiles, Aldo Stiles, alias El Petiso, El Ingeniero, o el Peluquero, nació el 26 de junio de 1953 en San Justo, Partido de La Matanza.

En la nebulosa que rodea a los espías, de él se asegura que ingresó en la desaparecida Secretaría de Inteligencia de Estado (SIDE) en 1972, y otras fuentes no confirmadas aseguran que en 1978 prestó servicios en el Batallón 601, el nombre con el que se hizo famoso el Servicio de Informaciones del Ejército (SIE), que fue uno de los instrumentos de la represión de la última dictadura argentina.

En los últimos años se encontró envuelto en la polémica, después de que algunos señalaran su responsabilidad en la filtración a la prensa de la fotografía de Ross Newald, ex jefe de la estación de la CIA en Argentina.

Recientemente saltó de nuevo a la actualidad cuando se supo que el fiscal Alberto Nisman mantuvo un contacto fluido con Stiuso, según asegura la Fiscalía argentina. Nisman murió en extrañas circunstancias mientras investigaba el atentado contra la sede de la AMIA en 1994.

El Gobierno de Kirchner había levantado el deber de "guardar secreto" a Stiuso, con el objetivo de que desvelase todo lo que sabía sobre el caso AMIA y la muerte de Nisman, a quien servía como fuente.

Pero Stiuso, asegurando temer por su vida, desapareció de la faz de la tierra, y ahora la propia presidenta Cristina Kirchner ha desvelado que "está siendo protegido por Estados Unidos".

"Hemos citado al embajador norteamericano para que nos indique en calidad de qué se encuentra esta persona en Estados Unidos. Sabemos que está aquí y no nos dieron ninguna explicación", afirmó Kirchner en una entrevista en Nueva York al canal C5N.

Está previsto que el embajador estadounidense Noah Mamet concurra durante la jornada de este miércoles a la sede de la cancillería en Buenos Aires.

Precisamente el lunes, en su discurso ante la ONU, Kirchner denunció "la falta de cooperación del gobierno de Estados Unidos en un tema estrechamente vinculado con el terrorismo internacional como fue el atentado a la Mutual judía".

A Stiuso lo requieren en Argentina por su relación con la causa de investigación de la muerte de Alberto Nisman, en la que el espía está acusado "desaparición de documentos y conductas dilatorias".Un fiscal contra la Casa Rosada

El cadáver del fiscal Nisman fue encontrado alrededor de las 22.00 (hora local) del 18 de enero de 2015 en su casa, ubicada en el 13º piso de la torre Le Parc, en Buenos Aires. El fiscal del caso AMIA estaba tendido en el baño y con un disparo encima de su oreja derecha.

Aunque en un principio se barajó la hipótesis del suicidio, ahora tanto la familia como los investigadores lo han descartado. El Gobierno, por su parte, apunta a un complot de la Secretaría de Inteligencia para derrocar al 'kirchnerismo'.

La muerte de Nisman causó una gran conmoción porque se produjo una semana después de que el fiscal acusara a la presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, y a su ministro de Exteriores, Héctor Timerman, de encubrir a los iraníes sospechosos del atentado.

El atentado contra la AMIA tuvo lugar el 18 de julio de 1994 en Buenos Aires y se saldó con 85 muertos y 300 heridos, convirtiéndose así en el mayor ataque terrorista perpetrado hasta ahora en suelo argentino.

A pesar de ello, sigue sin estar clara las razones por las que los sospechosos, que son cinco iraníes, nunca han sido interrogados. Entre los presuntos implicados están el ex presidente Akbar Hashemi Rafsanjani y el ex ministro de Defensa Ahmad Vahidi.

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