Asalto armado a las oficinas de médicos sin fronteras en baréin


Varios miembros armados de las Fuerzas de Seguridad de Baréin han irrumpido de forma violenta en las instalaciones de Médicos Sin Fronteras en Manama, en una acción que acabó con desperfectos materiales y la confiscación de todo el equipamiento y suministros médicos y de oficina.
Además, durante el asalto, ocurrido a finales de la semana pasada, fue arrestado el bareiní Said Madhi, que trabajaba con la organización como traductor y conductor, según informó este jueves MSF.
Desde el comienzo de las manifestaciones en Baréin, el pasado mes de febrero, MSF ha atendido a casi 200 heridos y enfermos que, bien por su implicación en las protestas o bien por simpatizar con los manifestantes, no se atrevían a acudir a las instalaciones médicas por miedo a ser detenidos.
El equipo de MSF ha visto a pacientes en aldeas de todo el país que han rechazado ser hospitalizados, a pesar de necesitarlo con urgencia debido al alto riesgo de ser arrestados, y a otros que habían recibido palizas en la cárcel.
"MSF ha sido transparente sobre su trabajo y sus intenciones con las autoridades del país, incluidos los ministerios de Salud y del Interior. Por este motivo, pensamos que el allanamiento de nuestras oficinas y la detención de un miembro del personal es algo injustificado e inaceptable", explicó Jerome Oberreit, director de operaciones de MSF en Bruselas.
Según Médicos Sin Fronteras, Mahdi sigue detenido por el hecho de haber ayudado a MSF y a un paciente llamando a una ambulancia. Pese a las peticiones de la organización, la familia y el abogado del arrestado no han podido visitarle.
MSF afirmó que estos hechos constituyen una transgresión de las instalaciones de una organización médico-humanitaria, así como de los derechos de los pacientes a recibir atención médica. Médicos Sin Fronteras ha expresado su preocupación tras estos incidentes en una carta al Ministerio del Interior de Bahréin.
Por ello, MSF instó a las autoridades de Bahréin a respetar la integridad, la seguridad y la privacidad de sus instalaciones y de su personal, y a permitir el acceso inmediato del abogado y la familia de Said Mahdi a su trabajador detenido.

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