Barranco recuerda la pasión de Tierno Galván por Madrid y los libros

Madrid.- Cuando han transcurrido 25 años de la muerte de Enrique Tierno Galván, su sucesor y actualmente diputado socialista, Juan Barranco, recuerda sobre todo "la pasión" del "viejo profesor" por Madrid y los libros.

En declaraciones a Efe, Barranco subraya "que ahora que tenemos un alcalde bastante distante con la ciudad, resalta la diferencia con Tierno y su pasión por Madrid y por los libros".

Barranco, largos años brazo derecho de Tierno en la alcaldía de Madrid, reivindica la figura de éste "como alcalde y político, pero también como intelectual".

Si repasamos la evolución de Madrid en los últimos 25 años, Tierno "seguramente estaría contento" de la trayectoria seguida por la ciudad, "porque era muy amante y defensor de la libertad y la democracia. Lo fue siempre y pagó un precio muy alto por ello, incluida la expulsión de la facultad".

"Se sentiría orgulloso y satisfecho porque se haya conseguido este período de paz y democracia tan largo", según Barranco, para quien, sin embargo, "como hombre de izquierdas, es posible que le gustara que la izquierda europa estuviera más presente y tuviera más fuerza que la que tiene, especialmente para afrontar esta crisis".

De Tierno, Barranco recordaría, "sobre todo, la buena gestión que hizo, no sólo en cuanto a la actividad cultural que fue mucha, y a la que puso en valor", sino "mas allá que su faceta como alcalde y político", porque "era un intelectual".

Julián Rebollo, de IU, que compartió legislatura con Tierno, afirma en declaraciones a Efe, que éste "representaba una izquierda capaz de resolver problemas".

"Era más que un alcalde, un verdadero representante de la izquierda. Pero también era un intelectual y reflejaba muy bien lo que queríamos conseguir", explica Rebollo.

Enrique Tierno Galván "tenía un sentido del municipalismo, de que las ciudades jugaran un papel importante en el Estado, y esto se ha perdido", a juicio de Rebollo.

"Era un hombre que cuidaba los presupuestos y miraba que fueran ajustados a las situaciones y que el madrileño se beneficiase de lo que había, no como ahora mismo, que estamos endedudados en los bancos", según Rebollo.

Veinticinco años atrás "se hacían las cosas con mucha participación de los ciudadanos. Ahora todo hay que alquilarlo o contratarlo y todo eso encarece todo muchísimo", agregó.

"Entonces, el alcalde era más que un alcalde, era la expresión de la izquierda como intelectual y profesor", argumentó.