Cacos comunes reconvertidos en ladrones de instrumentos musicales

Madrid, 4 jul.- Un grupo de ladrones que asaltaba locales de todo tipo decidió especializarse en robar instrumentos porque tenían fácil salida si se vendían a un precio muy inferior al del mercado. Su falta de conocimiento en la materia y el ansia de dinero les llevó a enfrentarse y finalmente han sido arrestados.

Así se ha desvelado en la operación Corchea Trompeta, llevada a cabo por la Guardia Civil y la Policía Nacional y que ha culminado con once arrestados y cinco imputados por perpetrar cinco robos en tiendas de instrumentos que luego vendían por internet o en tiendas de segunda mano.

Los robos se perpetraron en los últimos meses de 2012 de forma consecutiva, pero es ahora cuando han culminado las investigaciones que ambos cuerpos comenzaron por motivos diferentes, por separado.

La Guardia Civil comenzó a investigar un robo cometido en un comercio de instrumentos de Las Rozas en octubre de 2012 y poco después la Policía encontró en un registro, llevado a cabo por otro motivo, numerosos instrumentos. A partir de ahí trabajaron conjuntamente.

En total los ahora detenidos sustrajeron más de trescientos instrumentos valorados en más de medio millón de euros, además de 70.000 euros en metálico. Los agentes solo han podido recuperar una cuarta parte.

La banda solía actuar de madrugada, cuando llegaba al local y sus miembros rompían la puerta o el escaparate con mazas, cogían todos los instrumentos que podían del interior y los cargaban en una furgoneta.

En una ocasión robaron la furgoneta de la propia tienda porque en la suya no cabía todo, dado el tamaño de algunas de las piezas, como violonchelos. Se trata de la empresa Hazen, situada en el kilómetro 17 de la A-6, en Las Rozas, de la que se llevaron instrumentos valorados en unos 60.000 euros y 7.000 euros en metálico de la caja fuerte.

En uno de los casos, cuando robaron en una tienda del centro de Madrid -cercana a la plaza de Ópera- lo hicieron a las siete de la tarde, a plena luz del día.

No se sabe por qué decidieron robar una tienda de instrumentos la primera vez, ya que hasta ese momento los integrantes del grupo se habían dedicado a asaltar comercios y locales de cualquier tipo, normalmente con mazas. De hecho todos tienen numerosos antecedentes y entre todos suman unos 80 por robo con fuerza.

No entendían de música pero se dieron cuenta de que los instrumentos se vendían bien por internet o en tiendas de segunda mano, siempre que se hiciera a un precio bajo.

Llegaron a vender algunos de los instrumentos robados por 50 euros, cuando su precio era unas diez veces superior.

Aunque en la organización no había un jefe claro, varios de ellos organizaban los asaltos y luego repartían el botín. Lo hacían de forma desigual y éste fue el motivo por el que empezaron a enfrentarse entre ellos y unos extorsionaron a otros.

Al menos uno de ellos fue secuestrado por otros que exigían dinero porque se habían dado cuenta de que habían salido perjudicados en los repartos.

Tanto el teniente de la Guardia Civil como el inspector de Policía Nacional responsables de la operación han subrayado los graves daños que supusieron los robos para los dueños de las tiendas de instrumentos, que en el caso de la tienda de la plaza de Ópera supuso el cierre.

Esta es una de las primera operaciones de los Grupos Operativos de Investigación Zonal (GOIZ) de la Policía Nacional, creados a principios de junio en Madrid para descargar de trabajo a los equipos de policía judicial de las comisarías. Se trata de un proyecto piloto que se podría implantar en toda España.