Calcinadas más de 40.000 hectáreas de masa forestal en agosto en Portugal

  • Más de 40.000 hectáreas de masa forestal han ardido este mes de agosto en Portugal, debido a una oleada de incendios que sigue sin control y que hoy se cobró la vida de un bombero, el cuarto que fallece este verano.

Lisboa, 27 ago.- Más de 40.000 hectáreas de masa forestal han ardido este mes de agosto en Portugal, debido a una oleada de incendios que sigue sin control y que hoy se cobró la vida de un bombero, el cuarto que fallece este verano.

Del total de la superficie quemada, la mitad de ella fue pasto de las llamas en los últimos siete días, según datos del Sistema de Información de Incendios Forestales consultados por Efe.

El registro de este organismo europeo, que calcula el área calcinada a través de imágenes tomadas por satélite, supera los datos anuales contabilizados en 2007 y 2008, dos años con poca incidencia de fuegos.

Las cifras, sin embargo, están aún lejos de las 110.000 hectáreas que ardieron en 2012 o las cerca de 120.000 en 2010.

También distan de los fuegos de 2003 y 2005, los peores de las últimas décadas con 400.000 y 300.000 hectáreas calcinadas, respectivamente.

La intensidad del fuego en las últimas semanas mantiene en alerta a las autoridades y ha conmocionado de nuevo al país con el fallecimiento de un bombero, cinco días después de resultar herido en el virulento incendio de la sierra de Caramulo (interior-centro), en el que murió también una compañera.

El ministro portugués de Ambiente y Administración Territorial, Jorge Moreira da Silva, lamentó este nuevo fallecimiento y afirmó que este año es "particularmente exigente" para Portugal en la lucha contra el fuego, pero que no es el momento de hacer balance.

Se limitó a indicar que Portugal, junto a España, tiene "riesgos adicionales" en Europa en la lucha contra el fuego debido a los efectos del cambio climático, por lo que está obligado a movilizarse "cada vez más".

A las 14.00 GMT, seguían activos siete grandes fuegos en todo el país, en cuyas labores de extinción participaban cerca de un millar de bomberos y unos 200 vehículos de emergencias.

Las autoridades de protección civil y seguridad mantienen la alerta por riesgo máximo en treinta municipios y, pese a la intensidad de los fuegos, varios portavoces han insistido en que no hay falta de medios.

No obstante, los municipios afectados por las llamas y el propio Cuerpo Nacional de Bomberos han denunciado en las últimas semanas fallos en la política de prevención durante el invierno.

La Policía Judicial anunció hoy la detención de otro sospechoso de provocar un incendio, un joven de 19 años, alcohólico y sin profesión conocida residente en el castigado distrito de Viseu (interior-norte), con lo que ascienden a 43 los arrestados este verano.

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