Cameron afronta una votación clave sobre la reforma de la Cámara de los Lores

Londres, 10 jul.- El primer ministro británico, David Cameron, afronta esta noche una votación clave en el Parlamento sobre la reforma propuesta de la Cámara de los Lores, en la que una derrota supondría un duro golpe para el Gobierno de coalición.

El Gobierno conservador-liberaldemócrata ha presentado un proyecto de ley que establece una reducción del número de lores -a 450 desde los 775 actuales- y que el 80 % sea elegido en las urnas por un periodo de 15 años.

Los diputados de la Cámara de los Comunes, que ayer comenzaron a debatir el proyecto de ley de reforma de la Cámara alta, votarán hoy dos mociones: si aceptan que el texto pase a la próxima fase de trámite parlamentario y si aprueban el calendario dictado por el Gobierno.

Aunque es muy probable que el Ejecutivo supere el primer voto ya que contará con el apoyo de la oposición laborista, corre el riesgo de perder el segundo, pues la oposición está en desacuerdo con el calendario propuesto y podría unirse a un centenar de rebeldes conservadores que rechazan por completo la legislación.

Se espera que ambas votaciones se produzcan sobre las 21.00 GMT, tras un largo debate, según fuentes parlamentarias.

La oposición entre sus propias filas es uno de los principales problemas de Cameron pues 70 de sus correligionarios han firmado una carta en la que expresan su oposición a la reforma, que pretende reducir el tamaño y democratizar la histórica Cámara de los Lores.

Si el Gobierno pierde el voto, la tramitación de la ley se ralentizaría e incluso podría ser relegada, lo que tensaría las relaciones entre los conservadores y sus socios liberaldemócratas.

Aunque los tres principales partidos defendieron la reforma de los Lores en las elecciones de mayo de 2010, para los liberaldemócratas de Nick Clegg es un proyecto insignia con el que se juegan buena parte de su rédito electoral.

De ahí que, ante la posibilidad de una rebelión "tory" que la boicotee, los liberaldemócratas hayan instado a los conservadores a ser "disciplinados" y aceptar las condiciones del pacto que sustenta la coalición.

El Ejecutivo quiere acelerar el trámite de la legislación para poder celebrar las primeras elecciones a la Cámara alta en 2015, cuando tendrán lugar los próximos comicios legislativos.

Actualmente, los lores, entre los que se incluyen obispos delegados de la Iglesia Anglicana, son designados por los partidos políticos o han heredado el título, que desempeñan de forma vitalicia.

La reforma de la Cámara alta, cuya función es revisar la legislación elaborada en la Cámara de los Comunes (electa), desde siempre ha suscitado el rechazo de un sector de los "tories", que, temerosos de perder sus privilegios, alegan que los cambios provocarán una crisis constitucional.

Diputados de todos los partidos favorables a la reforma han difundido panfletos en su apoyo y subrayan que es una oportunidad única para acometer los cambios para democratizar la Cámara de los Lores, tras varios intentos infructuosos en el pasado.