"El Partido Laborista representa ahora una amenaza para nuestra seguridad nacional, nuestra seguridad económica y la seguridad de vuestra familia", declaró Cameron en su cuenta de Twitter.
El ministro de Defensa, Michael Fallon, hizo declaraciones similares la víspera, tras la victoria rotunda de Corbyn, elegido al frente del Labour con el 59,5% de los votos.
En su campaña de comunicación contra el nuevo líder laborista, el Partido Conservador llamó a retuitear el mensaje "El Partido Laborista representa ahora un riesgo serio para nuestra seguridad nacional".
Jeremy Corbyn, un antimilitarista convencido, propugna el desmantelamiento de los submarinos nucleares británicos Trident.
También se opone al funcionamiento actual de la OTAN y podría complicar el proyecto de Cameron de encontrar un consenso en el Parlamento para atacar en Siria al grupo Estado Islámico (EI).
"No estoy convencido de que los ataques en Siria traigan otra cosa que no sea la muerte de civiles", declaró Corbyn.
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