Soldados uniformados y dignatarios rodeados por una gran multitud además de policías fuertemente armados recordaron a la víctima.
El futuro primer ministro Justin Trudeau aseguró "no dejaremos que las amenazas nos definan y no nos doblegaremos frente a aquellos que ataquen nuestros valores y nuestra libertad",
"La imagen que tenemos de los canadienses que ayudan y protegen a otros canadienses corresponde a lo que somos realmente, y lo que debemos continuar siendo".
"Hoy, en este solemne aniversario, me uno a los canadienses de costa a costa en el compromiso de que continuaremos avanzando juntos".
El guardia Nathan Cirillo fue baleado durante el ataque hace un año mientras cumplía sus funciones frente al memorial que honra a los caídos.
El atacante, que había estado en una lista de terroristas y tenía su pasaporte confiscado para evitar que luche en el extranjero, fue abatido.
Dos días antes, un aprendiz yihadista baleó a dos soldados cerca de Montreal, matando a uno de ellos, antes de caer abatido por la policía.
Justin Trudeau, cuyo gobierno asumirá el 4 de noviembre, y el primer ministro saliente, Stephen Harper, depositaron en conjunto una ofrenda floral en el monumento a los caídos.
"Nuestros militares (...) encarnan perfectamente lo que significa ser canadiense y estaremos a la altura de la obligación sagrada de nuestro país hacia nuestros hombres y mujeres en uniforme", dijo Trudeau.
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