Bangkok, 20 sep.- Un tribunal de Tailandia condenó hoy a tres años de prisión al propietario de la discoteca de Bangkok que se incendió durante la fiesta de Fin de Año de 2009 en la que murieron 67 personas y un centenar resultaron heridas.
La Corte criminal de Bangkok encontró a Wisuk Setsawak culpable por negligencia con resultado de muerte y daños en la propiedad privada.
El juez también condenó a la misma pena a Boonchu Laosinat, el director de la compañía Focus Light Sound System, responsable del espectáculo pirotécnico que causó el fuego en la sala de fiestas Santika.
A la empresa Focus, además, se le impuso una multa de 20.000 bat (654 dólares o 478 euros), y a pagar junto a Wisuk y Boonchu, una indemnización de 8,7 millones de bat (284.807 dólares o 207.926 euros) a las familias de las víctimas.
Otros cinco imputados fueron absueltos.
El fuego se declaró en el primer minuto de 2009 a consecuencia de un espectáculo de fuegos artificiales que siguió la cuenta atrás a la llegada del nuevo año en el club Santika, situado en el barrio de Ekamai, y a la que solían ir tailandeses de clase media y extranjeros afincados en el país.
La mayoría de los cadáveres fueron encontrados cerca de la puerta principal, de pequeñas dimensiones, y por la que parte de los cerca de un millar de personas que había en la discoteca se abrieron paso para escapar de las llamas y el humo.
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