Pekín, 9 ene.- Cuatro oficiales de Ningxia, centro-norte de China, han sido cesados por la estampida que se produjo en una mezquita de esta región y que dejó 14 muertos y 10 heridos, según confirmaron hoy las autoridades locales.
El mortal incidente ocurrió el domingo por la tarde en una mezquita de la localidad de Jiqiang, en el condado de Xiji de la región autónoma de Ningxia, cuando se repartía comida a los asistentes de una ceremonia de veneración a un difunto líder religioso.
La estampida provocó la muerte de 14 personas -entre ellos, varios niños-, e hirió a una decena de personas, de las cuales algunas se encontraban en estado crítico a principios de esta semana, si bien se desconoce su estado actual.
Según confirma hoy la agencia oficial Xinhua aludiendo a las autoridades locales, Ren Lixin, el jefe del Gobierno del condado de Xiji, y otros tres oficiales más, incluido el director de la oficina de asuntos religiosos, han sido cesados de sus puestos a la espera de los resultados de la investigación abierta sobre lo ocurrido.
Las autoridades argumentaron que la causa de la estampida fue una mala organización y gestión de la ceremonia.
Por su parte, el director del comité administrativo de la mezquita donde ocurrió el incidente ha sido detenido, de acuerdo al Gobierno local.
El suceso ocurrió a unos 300 kilómetros al noroeste de la conocida ciudad de Xian, en una región, la de Ningxia, en la que habitan los chinos de la minoría Hui, en su mayoría, musulmanes.
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