Chaves invita al PP a ir a los tribunales si creen que su hijo ha delinquido

Madrid.- El vicepresidente tercero del Gobierno, Manuel Chaves, ha invitado hoy al grupo popular del Senado a acudir a los tribunales si creen que hay alguna irregularidad en la actividad profesional de su hijo, mientras que el PP ha reclamado de nuevo su dimisión y ha comparado su caso con el de Juan Guerra.

El PP ha continuado hoy con su ofensiva política contra Chaves a raíz de los expedientes de regulación de empleo (ERE) supuestamente irregulares en Andalucía, el caso Matsa y las informaciones que hoy publican algunos medios sobre las presuntas mediaciones de uno de sus hijos ante la Junta para varias empresas.

Un debate muy bronco, que ha obligado a intervenir en muchas ocasiones al presidente de la Cámara Alta, Javier Rojo, para pedir silencio, ante las constantes interrupciones desde las bancadas socialista y popular.

Chaves ha afeado a los dirigentes del PP que hayan pedido su dimisión "cientos de veces" en estos últimos años y lo ha achacado a su incapacidad para ganar unas elecciones en Andalucía y a que "no lo han asumido".

En este punto, se ha quejado de que cada vez que se aproximan unas elecciones el PP empieza una nueva "campaña de difamación" contra él y ha puesto como ejemplo el caso Matsa, surgido hace dos años, y las informaciones ahora sobre otro de sus hijos, a menos de 50 días para los comicios locales y autonómicos y a un año de las andaluzas.

Tras recordar que el Tribunal Supremo ya archivó la querella del PP contra él por el caso Matsa, el vicepresidente tercero ha lamentado que ahora recurran a su hijo, "utilizando papeles y documentos robados".

El vicepresidente ha señalado que nada tiene que decir de las actividades profesionales de su hijo, ha emplazado al PP a ir a los tribunales si creen que hay alguna conducta delictiva y ha expresado su "profunda repulsión" por lo que algunos "están dispuestos a hacer para llegar al poder a toda costa".

Con anterioridad, el senador del PP Rafael Salas ha considerado que, "afortunadamente, el régimen se cae", antes de instar a Chaves a tener "valentía política" y dar la cara, ser transparente, ofrecer explicaciones y dimitir.

A juicio de Salas, si el hijo de Chaves está actuando como intermediario, "cobrando suculentas comisiones" de hasta el 45 por ciento, el vicepresidente no puede hacer "un ejercicio de coger el paraguas y esperar a que escampe".

"Todo apunta a un manual de abuso de poder -ha denunciado Salas-, tráfico de influencias, favores y dineros, puertas que se abren, deudas que se pagan inmediatamente, tramitaciones que vuelan sólo con decir un nombre: Chaves".

También le ha reclamado la dimisión la senadora del PP Patricia Navarro, según cuyo criterio "el abuso y el trato de favor eran el modus vivendi" de Chaves y sus compañeros de partido en la Junta de Andalucía.

Navarro se ha referido a las informaciones sobre el hijo de Chaves para decir que a ella sus actividades como comisionista le suenan más "a aprovechado y caradura".

"Esto huele a Guerra, al caso Juan Guerra", que costó la dimisión del vicepresidente del Gobierno en 1991 (Alfonso Guerra), ha señalado Navarro, y ha reiterado que Chaves debería hacer lo mismo "si aún le queda un mínimo sentido de la responsabilidad".

"Si usted llama caradura a mi hijo, ¿qué le puedo contestar yo?", se ha preguntado a continuación Chaves, que no ha querido responder por "educación".