'Ciudadanos' impone en una decisión cerrada la disolución de la agrupación de Madrid

    • El partido celebra hoy una Asamblea Extraordinaria para informar a los afiliados de la capital de la disolución de la Agrupación madrileña.
    • La intención es fragmentarla en 21 agrupaciones de distrito. La afiliación lo entiende como una centralización del poder en Barcelona.

El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera.
El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera.

Ciudadanos celebra hoy en Madrid una Asamblea Extraordinaria informativa marcada por un innegable ambiente festivo- han pasado justo diez años desde que en la plaza Real de Barcelona se presentase el Primer Manifiesto de Ciutadans de Catalunya-pero también por el malestar por una de las últimas decisiones de la dirección de Rivera.

La formación 'naranja', que tras los resultados del 24-M se ha convertido en llave de gobernabilidad en varias autonomías y ayuntamientos estratégicos-disolverá la agrupación de Madrid para fragmentarla en 21 nuevas agrupaciones, correspondientes a los distritos de la capital.

La decisión fue comunicada el miércoles a los afiliados, a través de un correo electrónico enviado por Fran Hervías, secretario de organización del partido 'naranja', y se entiende cerrada. En el orden del día se marca esta Asamblea como meramente informativa, de modo que no se admite el voto. Sólo habrá turno para ruegos y preguntas. Tampoco ha sido consultada.

La imposición ha provocado descontento entre buena parte de los afiliados y las bases de la ciudad, donde el partido anotó una de sus mejores marcas en los pasados comicios, al lograr siete ediles en el ayuntamiento. En la Comunidad, el partido de Rivera resulta determinante para que el PP de Cristina Cifuentes logre el gobierno de los próximos cuatro años, o bien, se acabe formando un Ejecutivo regional de izquierdas, a cargo de Ángel Gabilondo (PSOE). Las negociaciones recaen en este caso en el hombre fuerte de Rivera en la comunidad, Ignacio Aguado, quien ha mantenido ya varios encuentros con dirigentes de distinto signo.

La decisión de 'dinamitar' la agrupación madrileña, que cuenta con 2.000 afiliados y es también la que ha ganado más peso en los últimos meses, es tomada por parte de las bases como una forma de centralizar la toma de decisiones en Barcelona, y evitar que Madrid siga ganando fuerza. La nueva organización supone que cada una de las nuevas agrupaciones esté integrada por apenas cien afiliados, cifra que entienden muy mermada, que contarán con un coordinador. Esta figura tendrá un papel más bien simbólico, pues pasará a integrar a su vez el Comité Territorial de la Comunidad de Madrid.

Los afiliados entienden con ello que los intereses de Madrid ciudad no quedarán representados, al no contar con ningún instrumento de decisión, como hasta ahora era la Asamblea de Agrupación de Madrid, de celebración bimensual y plataforma para la voz y voto de las bases madrileñas.

No es la primera vez que surgen voces críticas en el partido liderado por Albert Rivera. Varios afiliados de distintas comunidades autónomas anunciaban a mediados de mayo la creación de la corriente 'Democracia en Ciudadadanos', un movimiento creado en su origen para canalizar el malestar por la forma de elaborar ciertas candidaturas y que está integrado por militantes de Galicia, Asturias, Extremadura, Andalucía, La Rioja, Cantabria y Aragón.

En la nota, los miembros de esta plataforma afeaban un proceso, dirigido por Hervías, que consideraban sin "garantías democráticas". Los afiliados acusaban al secretario de Organización de intervenir en la imposición de determinadas personas en las listas "cuando no modificando la voluntad de las agrupaciones constituidas" y denunciaban incluso haber sido "represaliados" por la dirección. La plataforma reclamó entonces la celebración de "primarias abiertas, libres y participativas" para elegir a los miembros de la dirección del partido.

Con ésta, otra corriente crítica, articulada en la "Plataforma por las Garantías Ciudadanas" ha denunciado también "la absoluta falta de democracia interna y las actitudes dictatoriales" de Rivera y su equipo.


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