Confusión en torno a la inclusión de la vacuna del neumococo en Madrid

El pasado mes de noviembre el Consejo Interterritorial de Salud decidió financiar la vacuna del neumococo a partir de 2016. Entonces, sólo Galicia la incluía en el calendario infantil de vacunaciones. Desde entonces, a pesar de las pauta general impuesta por Sanidad y las Comunidades Autónomas, cada gobierno regional -en un año marcado por numerosas citas electorales y con un nuevo ministro, Alfonso Alonso, ocupando el ministerio, ha decidido tomar sus propias iniciativas para la consiguiente confusión de los padres.

Clara nació en octubre de 2014 en Madrid. Como tantos bebés madrileños,sus padres están costeando su vacuna del neumococo denominada Prevenar 13. No es cuestión baladí, no sólo desde un punto de vista sanitario -la bacteria del neumococo puede causar neumonía, otitis y meningitis, que puede resultar una patología mortal en niños menores de dos años- sino también desde una perspectiva económica. Una dosis cuesta 78 euros y son necesarias tres -a los dos, cuatro, y doce meses- para alcanzar la total inmunización del bebé. Es decir, en total el coste de la vacunación completa alcanza los 234 euros.

Tal y como ha anunciado este lunes la Consejería de Salud de Castilla y León, y el 12 de febrero el Principado de Asturias, Madrid se ha adelantado un año al acuerdo alcanzado por el Consejo Interterritorial de Salud para la aplicación gratuita de Prevenar 13 en los niños de la regíon en 2015. Sin embargo mantiene una novedad que a quien suscribe este artículo, como periodista y como padre, sume a los tutores del niño en la confusión.

En principio, la Comunidad de Madrid - que decidió retirar este tratamiento gratuito en mayo de 2012- aprobó incluirlo en el calendario vacunal gratuito para todos aquellos niños nacidos a partir del 1 de enero de 2015. Sin embargo, según fuentes sanitarias, la Consejería de Sanidad madrileña ha optado por ampliar dicha gratuitad a todos los bebés que hubieran recibido un primer pinchazo de Prevenar 13 a lo largo de 2014. Tal es el caso de Clara que este miércoles cumple cuatro meses.Buscando confirmación

Su madre encargó la vacuna del neumococo en la farmacia - además del Rotatec que combate al rotavirus, también excluída del calendario de vacunación- por lo que este padre (y periodista) ha acudido a su centro de salud correspondiente a comprobar dicha información. A priori, citando fuentes sanitarias publicadas en prensa, la consejería de salud madrileña había enviado una circular a todos los ambulatorios de la región informando de esta novedad que, para muchos padres, resulta fundamental.

Esta mañana tras padecer pacientemente la cola, mi centro de salud no ha sabido aclarar nada al respecto. De hecho, si nos detenemos en la perpleja expresión facial de mi interlocutor, ha parecido que era la primera vez que escuchaban la noticia. Cuando les he explicado que necesito comprobar esta información, dado que nada menos que 78 euros en juego, me han sugerido que acuda a la farmacia donde he encargado las vacunas: "Allí seguro que lo saben", me han dicho. Al parecer ninguna circular ha llegado a mi ambulatorio. Por el momento.

Así lo he hecho. En la botica la estupefacción ha sido similar y la respuesta si cabe aún más sorprendente. "Pregunta en el ambulatorio, allí seguro que lo saben". "De allí vengo he respondido" y entonces el farmacéutico de mayor rango -al menos así me lo ha parecido- ha llamado por teléfono. "¿Cuándo ha nacido su hija?" me ha preguntado, "la vacuna es gratis para todos los nacidos en 2015". "Sí", he respondido, "pero he leido que si tuvieron un pinchazo en 2014 el resto de dosis también son gratis. Su lacónica contestación no me ha acabado de dejar satisfecho: "Pues en principio será así".

Acto seguido, pasadas las dos de la tarde, he llamado al 012, el número de Información al Ciudadano de la Comunidad de Madrid. Tras volver a esperar pacientemente me han comentado que el horario -prensa incluida- para este tipo de consultas es de 9 de la mañana a las 14 horas. Mi insistencia no ha tenido ningún efecto, aunque, al menos, me han dado las gracias por mi llamada.

Una vez en la redacción he llamado al ministerio de Sanidad que me ha instado a enviar una solicitud formal de información a la Dirección General de Salud Pública para tratar de resolver este nuevo galimatías vacunal sanitario.

Así que podremos concluir este artículo con una frase digna de un teletipo periodístico: "seguirá ampliación".