Correa tilda de sospechoso que jueza haga ahora denuncia en caso El Universo

Quito, 15 feb.- El presidente de Ecuador, Rafael Correa, afirmó hoy que la magistrada que acusó a su abogado de ser el autor del fallo contra el diario El Universo debió hacer su denuncia cuando supuestamente ocurrió la "irregularidad" y afirmó que es "sospechoso" que hable ahora.

Correa hizo sus declaraciones en una rueda de prensa en la Corte Nacional de Justicia, donde tiene lugar la audiencia sobre el recurso de casación presentado por el rotativo para intentar revocar la condena de tres años de cárcel y el pago de 40 millones de dólares contra sus tres principales directivos y el exeditorialista Emilio Palacio.

"A mí sí me resulta tremendamente sospechoso que la jueza no diga nada cuando supuestamente le proponen una irregularidad, y que lo diga siete meses después, un día antes de la última audiencia", afirmó el presidente. "¿Por qué no lo hizo a su tiempo?", se preguntó.

En una declaración ante la Fiscalía divulgada ayer por El Universo, la magistrada Mónica Encalada afirmó que el juez Juan Paredes, que firmó el fallo de primera instancia contra el diario, le reveló que el autor real de la sentencia era Gutemberg Vera, uno de los abogados de Correa.

También le dijo, según ella, que el letrado ofrecía dinero al magistrado que se encargara del caso.

"¿Por qué le tengo que creer a ella y no al juez Juan Paredes?", dijo Correa, quien apuntó que la declaración ante la Fiscalía es confidencial, por lo que se preguntó cómo llegó a manos de El Universo.

Por su parte, Joffre Campaña, abogado del diario, explicó a la prensa que la Fiscalía, que investiga la actuación de Paredes en la elaboración de la sentencia, envió a Encalada un oficio con fecha de ayer para que fuera a declarar.

Campaña dijo creer que la providencia de la Fiscalía motivó la declaración ahora de la jueza, quien estuvo temporalmente a cargo del juzgado que vio el caso, que al final resolvió Paredes.

"Puede ser el caso de corrupción judicial más grave de Ecuador", afirmó el letrado.

Por su parte, Vera ha negado las acusaciones de Encalada y ha dicho que "lógicamente fue coimada" (sobornada).

La audiencia continúa después de diez horas de sesión de presentación de los abogados de El Universo, tan solo con breves recesos, tras lo cual comenzó la intervención de los abogados del presidente.

Correa dijo que la estrategia del diario es "quemar tiempo para que la sentencia no se dé el día de hoy".

En cambio, Campaña se quejó de que el proceso contra el rotativo probablemente sea "el juicio más rápido de Ecuador" y dijo que la justicia ha privilegiado la causa del presidente frente a otras.

Además, afirmó que los tres jueces de la Corte que ven el caso "no se han leído el expediente y probablemente no se han leído la sentencia" contra El Universo. Los magistrados recibieron el caso el pasado jueves.

En su rueda de prensa, Campaña también se refirió a un correo electrónico de supuesta autoría de la jueza respecto al cual El Universo publicó una nota en Internet en la que pedía "disculpas" por su declaración.

El letrado afirmó que "no es verdad que se haya retractado" y afirmó que tampoco se sabe si el mensaje lo escribió verdaderamente ella.

En cambio, Fernando Alvarado, Secretario Nacional de Comunicación, denunció que "El Universo publica que la jueza se ha retractado y luego borran eso, y lo bajan de la página".

El caso se inició a raíz de una columna de Palacio publicada en 2011, en la que afirmaba que en el futuro Correa podría ser enjuiciado "por haber ordenado fuego a discreción" contra un hospital lleno de civiles, durante una revuelta policial el 30 de septiembre de 2010.

Ese día estuvo retenido por más de nueve horas en un hospital policial, del que fue rescatado en medio de un tiroteo. En esa jornada murieron cinco personas en Quito, algunas de ellas durante la acción de rescate.

Mientras se realizaba la sesión en el piso octavo de la Corte Nacional, en las inmediaciones algunos partidarios de Correa quemaron copias de El Universo y otros diarios y cantaron consignas contra la prensa "corrupta".

Ese grupo propinó además golpes y patadas a algunos periodistas que cubrían la concentración, y también protagonizó un altercado con detractores del Gobierno congregados en los alrededores del tribunal.