La tasa de paro de Estados Unidos descendió tres décimas en el mes de mayo, hasta el 4,7%, la menor desde noviembre de 2007, mientras que la economía estadounidense generó 38.000 nuevos puestos de trabajo no agrícola, su nivel más bajo desde septiembre de 2010, tras el impacto de la huelga de Verizon, según los datos publicados por el Departamento de Trabajo.
De esta forma, el número de desempleados descendió en un total de 484.000 respecto al mes anterior, hasta un total de 7,4 millones, una cifra que se mantiene estable desde el pasado mes de agosto.
En el último mes, la tasa de desempleo ha descendido en la mayoría de los grupos de población, bajando en tres décimas tanto el paro masculino como el femenino, hasta 4,3% y 4,2%, respectivamente. El desempleo juvenil se mantuvo estable en el 16%.
Asimismo, el número de parados de larga duración --aquellos que se mantienen en situación de desempleo por un periodo igual o superior a 27 semanas-- bajó en 178.000 personas en mayo, hasta un total de 1,9 millones. En mayo, este grupo representó el 25,1% del total de desempleados.
El Departamento de Trabajo norteamericano ha destacado que de los 38.000 nuevos empleos la mayoría se han creado en el sector sanitario, mientras que la minería continúa perdiendo empleos.
El sector de las telecomunicaciones sufrió el impacto negativo de la huelga de Verizon, que afectó a un total de 40.000 trabajadores y que se extendió durante un periodo de tiempo superior a seis semanas.
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