Buenos Aires, 10 dic.- Cristina Fernández rompió hoy todas las reglas del protocolo en la ceremonia de asunción de su segundo mandato presidencial, al evocar a su esposo y antecesor, Néstor Kirchner, en la fórmula de juramento y recibir la banda presidencial de manos de su hija menor, Florencia.
Vestida de riguroso luto, Fernández juró desempeñar con lealtad y patriotismo el cargo de presidenta de la nación y agregó: "si así no lo hiciese que Dios, la Patria y él (Kirchner) me lo demanden".
La presidenta recibió la banda presidencial de manos de su hija menor y tomó ella misma el bastón de mando.
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