Las acusaciones serán presentadas ante la justicia este domingo, y están relacionadas con el incendio de una casa en la aldea de Duma, en Cisjordania, que provocó la muerte de tres miembros de una familia palestina.
La declaración detalla que dos de los acusados son menores.
El ataque contra la familia palestina Dawabsha suscitó una oleada de indignación dentro y fuera de Israel, cuyo gobierno estaba sometido a fuertes presiones para que actuara rápidamente, como acostumbra a hacer cuando hay ataques palestinos.
Los servicios de seguridad interna, Shin Bet, mantuvieron a los sospechosos bajo detención administrativa, les denegó a algunos la posibilidad de recibir a un abogado durante parte de su arresto e incluso utilizó fuerza física durante las investigaciones, denunciada como tortura.
El Shin Bet negó haber utilizado métodos ilegales, y recalcó que la investigación fue supervisada por el fiscal Yehuda Weinstein.
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