De Guindos tiene diez días para aclarar su papel en la crisis de Bankia

Madrid, 14 mar.- El ministro de Economía, Luis de Guindos, tiene diez días para contestar las preguntas que las partes del caso Bankia le han formulado, con las que se despejarán las numerosas incógnitas surgidas sobre su presunta intervención en la gestión de la crisis de la entidad y la marcha de Rodrigo Rato.

En una providencia notificada ayer, a la que ha tenido acceso Efe, el magistrado de la Audiencia Nacional Fernando Andreu ha dado traslado a De Guindos de los últimos cuestionarios realizados por los abogados de tres de los exconsejeros imputados, que se suman a los que ya remitió de la Fiscalía, UPyD y otras defensas.

Andreu da un plazo de diez días a De Guindos para responder a todas ellas, "recibiéndole juramento de decir la verdad en lo que sepa", y le informa de la obligación que tiene de "ser veraz y las penas con que el Código Penal castiga el delito de falso testimonio".

Un plazo que, según han informado a Efe fuentes jurídicas, comienza hoy, pues se computa desde el día siguiente a su notificación.

En concreto, las últimas preguntas que ha recibido el ministro proceden de los representantes de CCOO Pedro Bedia y Francisco Baquero y el exconsejero independiente Juan Llopart, que llegan después de las que ya hizo el exconsejero de IU en Bankia, José Antonio Moral Santín.

Su eje central, como las del resto, gira en torno al plan de capitalización que según Rato y otros tantos exigió Economía a Bankia a pesar de tener uno ya aprobado por el Banco de España el 17 de abril, y cuyo rechazo precipitó la marcha del ex director gerente del FMI al frente de la entidad.

Mientras completa los formularios, De Guindos ya ha expresado en distintas ocasiones que Rato abandonó Bankia "por decisión personal" y no porque se lo pidiera el Ejecutivo, y que fue el expresidente de Bankia quien propuso como su sucesor a Goirigolzarri.

Una versión que coincide con lo expresado por el propio Goirigolzarri en la Audiencia Nacional, donde dijo que le sorprendió que Rato le hiciera esta oferta, que aceptó por "responsabilidad" y después de que le animara De Guindos.

Respecto al último plan elaborado por Rato para lograr el visto bueno de Economía, De Guindos explicará que era una simple propuesta que llegó el 4 de mayo y ni siquiera tuvo tiempo para valorar porque el ex vicepresidente del Gobierno abandonó Bankia tres días después.

Además, desvelará previsiblemente que durante los últimos días de abril Rato le trasladó que estaba a punto de cerrar la fusión de Bankia con Liberbank, el grupo liderado por Cajastur, lo que allanaría el camino para su recapitalización.

En su declaración ante el juez, Rato no mencionó esta posibilidad aunque posteriormente el presidente en España de Lazard, Jaime Castellanos, reveló al juez que el consejo de administración de Bankia aprobó encargarle un estudio sobre posibles fusiones por el que cobraría más de 10 millones.

En ese informe, Lazard habría sopesado la posibilidad de que Bankia cerrara una fusión con Banca Cívica, Unicaja y Liberbank.

De Guindos tendrá que detallar también las personas que intervinieron en las negociaciones con la entidad y si se consultó con el Banco de España la necesidad y alcance de un nuevo plan.

Por último, tendrá que dar su opinión sobre el desfase de las cuentas de la entidad, que en marzo daban un beneficio en 2011 de 309 millones, que el 25 de mayo se convirtieron en unas pérdidas de 2.979 millones.