Detienen a la esposa del vigilante voluntario que mató a joven negro en EEUU

Miami (EE.UU.), 12 jun.- La esposa de George Zimmerman, el vigilante voluntario que mató en Florida (EE.UU.) a un adolescente negro desarmado, ha sido detenida hoy, acusada de mentir sobre el dinero que tenía el matrimonio cuando se fijó la fianza de su marido.

La Oficina del Sheriff del Condado Seminole detalló que Shellie Zimmerman, de 25 años, fue detenida a las 15.30 hora local (19.30 GMT), acusada de perjurio, y encerrada en el mismo penal donde su marido espera ser juzgado por homicidio en segundo grado por la muerte de Trayvon Martin, de 17 años.

Tras su ingreso en el penal de John E. Polk, en el citado condado del centro de Florida, la mujer pagó los mil dólares que se le habían impuesto de fianza y fue puesta en libertad.

Esta breve detención tuvo lugar después de que el propio Zimmerman, de 28 años, ingresara de nuevo en prisión el pasado 1 de junio a petición de la Fiscalía.

Las autoridades lo acusaron también de haber mentido durante la audiencia celebrada el 20 de abril para determinar si procedía permitirle salir de prisión bajo fianza, y establecer cuál debía ser el monto de la fianza.

Según las autoridades, el matrimonio se puso de acuerdo para mentir sobre el dinero que tenían y lograr así que la fianza fuera menor.

Aunque el matrimonio tenía un nivel medio de vida antes de la muerte de Trayvon Martin, el pasado 26 de febrero, a raíz de la enorme polémica que se generó en torno a su inicial mantenimiento en libertad, Zimmerman empezó a recibir donaciones de gente que apoyaba su causa y llegó a reunir 204.000 dólares.

Sin embargo, no informó a sus abogados de ello y el día de la audiencia para la fianza tampoco lo mencionó, por lo que se estableció una fianza de 150.000 dólares, de los que inicialmente sólo tuvo que pagar el 10 por ciento a modo de garantía.

Durante aquella audiencia, las partes interrogaron por teléfono a la esposa y los padres de Zimmerman sobre los recursos económicos que tenían para afrontar el pago de la fianza.

Shellie Zimmerman dijo entonces que no sabía cuánto dinero en donaciones había recibido su esposo y que no tenían muchos recursos para hacer frente al pago de la fianza. En cualquier caso, aseguró que otros familiares se habían comprometido a tratar de reunir todo lo posible.

Sin embargo, la Fiscalía asegura haber descubierto que la mujer sacó de la cuenta de su marido 74.000 dólares cuatro días antes y que, incluso, ambos hablaron de ello de forma encubierta durante conversaciones que mantuvieron cuando el hombre estaba en prisión.

El padre de Zimmerman, Robert, añadió que los recursos económicos de la familia no eran muchos y que la vivienda en la que él vive está hipotecada.

"Yo soy un veterano discapacitado y mi esposa está jubilada", relató el hombre, quien aún así dijo estar dispuesto a pedir una segunda hipoteca para respaldar parte de la fianza y lograr que su hijo saliera de prisión.

Tras oír sus testimonios, el juez Kenneth Lester fijó la fianza en 150.000 dólares, muy por debajo del millón de dólares que pedía la Fiscalía y por encima de los 15.000 dólares que pedía la defensa.

A los pocos días, fue su propio abogado, Mark O'Mara, el que anunció que Zimmerman había recaudado 204.000 dólares, por lo que la Fiscalía reclamó que se elevara la fianza, pero el juez se negó a ello, así como a hacer públicos los nombres de los donantes.

El exvigilante voluntario alegó desde un principio que actuó en defensa propia cuando mató de un tiro a Trayvon Martin, pese a que éste se encontraba desarmado. Ante la falta de testigos o pruebas que demostraran lo contrario, las autoridades locales decidieron en un principio no detenerlo.

La presión pública y las protestas de la comunidad afroamericana que se sucedieron por todo Estados Unidos, con críticas a Zimmerman de actuar movido por prejuicios raciales, se relajaron cuando un mes y medio después del incidente la Fiscalía presentó cargos contra él, lo que llevó a su detención.