El congreso aboga por conjugar la defensa de "los intereses del estado con la defensa de los derechos humanos"


El secretario primero de la Mesa del Congreso de los Diputados, Javier Barrero, dio lectura hoy a una resolución del Pleno sobre el Día Internacional de los Derechos Humanos, en la que se aboga por continuar desarrollando una política exterior que haga "compatible la defensa de los intereses del Estado con la irrenunciable defensa de los derechos humanos".
Los parlamentarios elogian la labor de quienes individualmente o de manera colectiva defienden los derechos humanos de manera pacífica y, además, son objeto de "amenazas y agresiones en muchos lugares del mundo".
La resolución contempla el rechazo de las "ejecuciones, torturas, detenciones arbitrarias, amenazas de muerte, ostigamiento, calumnias y condenas injustas" de las que estos activistas son víctimas con frecuencia.
En ese sentido, el Congreso se declara impulsor y seguidor de la Declaración de Naciones Unidas sobre defensores de los derechos humanos de 2004, "conscientes de la importancia del control parlamentario en el diseño de una política de relaciones exteriores" que ponga en práctica las "herramientas" en defensa de esos derechos.
Así, la Cámara Baja se compromete a continuar desarrollando una política exterior que haga "compatible la defensa de los intereses del Estado con la irrenunciable defensa de los derechos humanos".
Recordó que la Unión Europea tiene por objetivo la defensa de estos principios a través de la creación del Servicio Europeo de Acción Exterior, que deberá jugar "un papel clave" en la defensa de los compromisos comunitarios en materia de derechos humanos.
Los parlamentarios españoles confían en que ese servicio "disponga de los recursos necesarios" para garantizar la continuidad de todas a las iniciativas de protección de los defensores de derechos humanos en situación de riesgo.

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