El ex concejal de Urbanismo de Gondomar niega su relación con supuestos sobornos

  • Vigo.- El ex concejal de Urbanismo de Gondomar, Alejandro Gómez, negó esta mañana que tuviese relación alguna con los supuestos cobros de sobornos a cambio de favores urbanísticos en el municipio.

Vigo.- El ex concejal de Urbanismo de Gondomar, Alejandro Gómez, negó esta mañana que tuviese relación alguna con los supuestos cobros de sobornos a cambio de favores urbanísticos en el municipio.

De esta manera, Gómez contradijo las declaraciones del que fue su compañero de corporación, José Luis Mosquera, quien volvió a implicarle en la operación, e incluso reveló que el dinero recaudado se iba a destinar a financiar la próxima campaña en las municipales.

Durante la segunda sesión del juicio por presuntos delitos de sobornos, José Luis Mosquera continuó su declaración y afirmó que ni el PP, ni el por entonces alcalde Carlos Silva, ni la candidatura independiente Move Nigrán, a la que supuestamente querían beneficiar con parte del dinero recaudado, tenían constancia de lo que estaba ocurriendo.

Sucede que la operación, según el relato de Mosquera, se realizaba de acuerdo con el ex concejal de Urbanismo a fin de recaudar fondos para las elecciones municipales.

Alejandro Gómez negó con rotundidad estas afirmaciones y llegó a afirmar que su relación con Mosquera era estrictamente profesional, ello a pesar de que el fiscal mantiene la existencia de grabaciones en las que los dos concejales mantenían conversaciones con el arquitecto vigués Borja Ramilo, uno de los implicados en el caso.

El concejal del PP fue rotundo al indicar que no sabía lo que estaba haciendo el responsable municipal de Cultura, y que en ningún momento estuvo informado de las reuniones que podría mantener con empresarios y con el arquitecto vigués.

En su declaración, la ex novia del edil de Cultura, Belén Fernández, manifestó que no sabía nada de la supuesta operación, si bien reconoció que entre los dos concejales las relaciones eran muy estrechas y que iban más allá de lo laboral.

Durante la sesión, el fiscal dejó claro que los proyectos sobre los que se habrían negociado los sobornos eran totalmente legales, por lo que podían haber sido aprobados en el Plan General.

El juicio, que se celebra en la Sección Quinta de la Audiencia Provincial, en Vigo, continuará mañana con la declaraciones de los empresarios que se supone fueron víctimas de sobornos.

El fiscal acusa a los dos ex concejales, a la novia de José Luis Mosquera y al arquitecto Borja Ramilo de haber negociado una aportación de 960.000 euros a cambio de apoyar tres proyectos urbanísticos en 2007 en el municipio pontevedrés, por lo que pide que hagan frente a multas que superan los cuatro millones y medio de euros, y a que se les suspenda para ocupar cargos o empleos públicos.

Este escándalo urbanístico en Gondomar saltó a la opinión pública cuando efectivos de la Guardia Civil detuvieron, en febrero de 2007, al ex concejal de Cultura y a su pareja, después de recibir en una cafetería de Vigo un paquete con 60.000 euros, supuestamente a cambio de incluir en el Plan General el permiso de construcción en una finca.

Mostrar comentarios