El fiscal mantiene la petición de 6 años al "narco" que se cambió las huellas

Alicante, 31 oct.- El fiscal mantiene la petición de 6 años de cárcel para el narcotraficante que estuvo 12 años huido y que se cambió las huellas dactilares por las de los pies, Francisco Javier Martínez San Millán, alías "El Franky", al creer probado que blanqueó capitales de la droga para vivir prófugo opulentamente.

Hoy ha quedado visto para sentencia el juicio al "narco", que tiene por delante más de 42 años de cárcel por las operaciones "Nécora", "Temple" y "Tapia de Casariego" (Asturias) y quien fue detenido en agosto de 2006 al salir de una lujosa mansión de Pedreguer (Alicante) valorada en tres millones de euros, junto a sus dos hijos, padres y su exmujer, también procesada con varios colaboradores más.

Al ser arrestado en la que se supone que era su residencia, "El Franky", que se hacía pasar por piloto de aviones y con el rostro ligeramente cambiado por cirugía estética, no opuso resistencia y exclamó a los agentes del grupo de fugitivos de la Policía Nacional: "Se me acabó la vida de lujo que llevaba".

El fiscal pide 6 años de prisión y una multa de 4.211.901 euros al creer que ha blanqueado dinero del narcotráfico para vivir con lujo entre los años que estuvo huido (1994 y 2006), y para adquirir numerosas propiedades, que ponía a nombre de allegados para evitar que se le vinculara con las adquisiciones.

Para la acusación, la meticulosidad de este hombre para no ser descubierto hizo que, incluso, se hiciera sustituir las huellas dactilares de los dedos pulgar e índice de la mano derecha por las de los pulgares de los pies.

En la sesión inicial del juicio, "El Franky", de 49 años, aseguró que el cambio del dibujo dactilar se explica en que durante su etapa de huido se aplastó los dedos con una prensa en un "accidente laboral" en una empresa que situó en "La Mancha", aunque los peritos descartan esta versión porque hay una cicatriz alrededor de los dedos que confirma la intervención quirúrgica.

En las conclusiones finales, el abogado del "narco" ha pedido la libre absolución por este caso, lo mismo los letrados de sus colaboradores, para los que se piden cuatro años de cárcel y multas, la más alta para la exmujer y madre de sus hijos, María Isabel G.D., por 600.000 euros, que entre 1994 y 2006 compró varias propiedades.