El Gobierno vasco vincula la violencia callejera con protestas antisistema

Vitoria, 5 jul.- La consejera vasca de Seguridad, Estefanía Beltrán de Heredia, ha vinculado los últimos actos de violencia callejera sufridos en Euskadi con protestas antisistema, aunque ha reconocido que en los mismos han podido participar personas relacionadas con la "antigua kale borroka".

Este análisis ha sido desvelado por la consejera en una respuesta parlamentaria por escrito, a la que ha tenido acceso Efe, a una pregunta formulada por el popular Iñaki Oyarzábal, quien le ha pedido detalles sobre un "posible rebrote de la kale borroka".

La titular de Seguridad ha señalado que los ataques perpetrados en Euskadi durante los últimos meses cuentan todos con características específicas.

Por un lado, están dirigidos "casi de forma exclusiva a objetivos generalmente atacados por grupos antisistema de la órbita anticapitalista", según la consejera.

Asimismo, ha asegurado que la mayoría de ellos se produjeron en el contexto de la huelga general del 30 de mayo convocada por razones socioeconómicas.

La consejera ha recordado que estos ataques también se están llevando a cabo fuera del ámbito vasco y, en general, en muchos países europeos, lo que provoca un "efecto llamada" en otros territorios.

En cuanto a la autoría de estos sabotajes, Beltrán de Heredia ha manifestado que, aunque en algunos de ellos han podido tomar parte personas con vinculación a la "antigua kale borroka, tampoco hay que descartar la participación de personas ajenas a la misma".

En este sentido, ha indicado que en algunos casos la metodología ha sido similar a la empleada en acciones perpetradas por la violencia callejera vinculada al entorno de la izquierda abertzale.

No obstante, la consejera ha insistido en que los objetivos reivindicativos han sido distintos. A pesar de ello, ha aclarado que la ausencia de detenciones mantiene "todos los análisis e hipótesis abiertos".

Por último, ha llamado la atención sobre el hecho de que acciones relacionadas directamente con grupos antisistema se están calificando como "kale borroka" en el resto del Estado.