El nuevo gobierno de Rudd se centrará en mantener la economía australiana

  • Los ministros del gabinete del nuevo primer ministro australiano, Kevin Rudd, juraron hoy sus cargos en un gobierno cuyo objetivo es el de "mantener la fortaleza económica" del país oceánico.

Sídney (Australia), 1 jul.- Los ministros del gabinete del nuevo primer ministro australiano, Kevin Rudd, juraron hoy sus cargos en un gobierno cuyo objetivo es el de "mantener la fortaleza económica" del país oceánico.

El Ejecutivo -que contará con seis nuevas ministras, con lo que son once el número de mujeres con cartera ministerial- juró sus cargos ante la gobernadora general de Australia, Quentin Bryce, en una ceremonia oficial en Camberra.

"Estoy complacido de que nuestro gabinete tenga el mayor número de mujeres en el Gobierno en la historia australiana", dijo el primer ministro en la ciudad australiana de Newcastle.

Rudd manifestó también que su gobierno buscará diversificar la economía, dar un impulso al sector manufacturero y la productividad, y trabajar al mismo tiempo con los empresarios y sindicatos para velar por los empleos, el crecimiento y los estándares de vida.

El líder laborista lo calificó de "fuerte equipo económico muy competente y capacitado".

Chris Bowen, una de las claves para el retorno de Rudd al liderazgo, es el nuevo Tesorero Federal, en lugar de Wayne Swan, quien presentó su renuncia junto a la exprimer ministro Julia Gillard.

Joel Fitzgibbon y Kim Carr, quienes también regresan a la primera línea política de la mano del laborista, fueron nombrados ministro de Agricultura y ministro de Industria y Ciencia, respectivamente, entre otros cambios de cartera ministerial.

Rudd asumió el jueves pasado el cargo de primer ministro tras arrebatárselo a Gillard, en medio de una crisis de liderazgo que motivó la renuncia de varios ministros y dejó al nuevo jefe del Ejecutivo australiano con la opción de promover a varios de sus colaboradores.

Una encuesta que publica hoy Newspoll señala que el Partido Laborista obtendría una intención de voto del 35 por ciento para las elecciones del 14 septiembre, lo que supone un aumento del 6 por ciento desde que Rudd retomó las riendas, y se acercaría a la coalición conservadora que tiene el 43 por ciento de los sufragios.

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