Elecciones 22-M: ¿Cómo recolocar a los concejales derrotados?

Ir de candidato en una lista de un partido político para un ayuntamiento no significa empleo seguro, porque en unas elecciones puede pasar cualquier cosa. La frase más repetida por los socialistas el domingo por la noche conforme se confirmaban los resultados era "sorpresa", pero no por la derrota, esperada, si no por la goleada que sufrieron.

Además de la "reflexión" a la que muchos dirigentes del PSOE se refirieron este lunes antes de la Comisión Ejecutiva Federal del partido, los socialistas tienen que plantearse qué hacer con los suyos, con los dirigentes que supuestamente iban a entrar en un ayuntamiento pero se han quedado a las puertas: 2.262 concejalías perdidas.

Los márgenes de maniobra habitual se han visto considerablemente reducidos. A los políticos que no entraban en las listas pero se quería premiar su trabajo se les suele asignar como asesores en ayuntamientos más grandes, en las diputaciones provinciales o en los organismo semipúblicos asociados tanto a consistorios como a gobiernos autonómicos.

Sin embargo, la presencia del PSOE en estas instituciones se ha visto muy mermada. Por ejemplo, a falta de los pactos finales, en un principio, el PSOE solo va a presidir seis diputaciones provinciales en toda España, con la reducción de puestos de confianza que esto conlleva.

Además ha perdido todos los grandes ayuntamientos --la ciudad más poblada que va gobernar es Vigo-- y han visto reducida su presencia en las grandes capitales: en Valencia y en Sevilla cuatro concejales menos y en Madrid y Barcelona tres menos. En estos casos no solo tiene que lamentar los concejales que tienen de menos, sino los puestos de trabajo que esta reducción conlleva.

Los concejales liberados

En estas grandes ciudades los cargos públicos electos suelen ser "liberados" de sus profesiones habituales para dedicarse en exclusiva a labor municipal, como ocurre por ejemplo con los liberados sindicales.

En las ciudades más pequeñas esto muchas veces no puede darse por el presupuesto que manejan los municipios, por lo que siguen en sus puestos de trabajo habituales en los que pueden "liberarse" determinadas horas al día para ejercer su cargo público.

Por ello, entre los políticos sobre todo hay profesionales liberales, como abogados o profesores, cuyos horarios suelen ser más flexibles para adaptarse a las obligaciones de regidor de un ayuntamiento. Estos, juntos a los que políticos que tiene plaza en cualquier administración, son los que no van a tener problemas a la hora de volver a sus vidas lejos del cargo público.

Sin embargo, los que dependían de la empresa privada se pueden encontrar con los efectos de la crisis económica si la empresa en la que trabajan ha desaparecido o están en proceso de desaparecer.