Elecciones 22-M: En la clase política abundan los abogados pero se necesitarían más profesores

Físicos, ingenieros, filósofos e incluso algún matemático. Entre la clase política hay todo tipo de profesionales, como se puede comprobar en este gráfico con la formación de los candidatos autonómicos y los principales cabezas de lista en las capitales de provincia. Pero ¿cuál sería la profesión ideal?

Los licenciados en Derecho, sin duda, son los que más dan el salto a la política. Ellos tienen una ventaja sobre el resto, el conocimiento legislativo necesario si llegan a un parlamento o un ayuntamiento en los que tienen que preparar leyes y ordenaciones.

Sin embargo, Jesús Ortega, consultor político, asegura que un profesor universitario tiene muchas más cualidades para ser un buen representante público.

“Tienen la capacidad didáctica necesaria, la experiencia investigadora y la renovación formativa. Además tiene una fuerte vocación de servicio público”, subraya Ortega.

Para este consultor político, muchos de los profesores universitarios son líderes en sus ámbitos, ya que es “más fácil” conseguir un reconocimiento social en el ámbito académico que en el del derecho.

En su opinión, los abogados, fiscales o jueces pueden ser “animales en derecho, pero les faltaría un plus, sobre todo, en liderazgo”.

Un buen político debería ser “multidisciplinar” y tener conocimientos básicos en materias como derecho y economía, así como dotes extra académicas, como por ejemplo el “don de gentes”.

“La formación no es imprescindible pero sí es indispensable. No hay que ser estrictos en la formación recibida, sino en los conocimientos que ha ido adquiriendo”, insiste el consultor, quien asegura que lo importante en un político es tener la vocación de servicio público.

No obstante, Ortega recuerda que hay “demasiados políticos que viven exclusivamente de la política”, porque, critica, en España los políticos ascienden más por los años de militancia que por la experiencia y la formación profesional.

En algunos países, a diferencia que en España, recuerda Ortega, existen requisitos de formación mínima para ser diputados.