La apertura de la causa fue ordenada por el juez Claudio Bonadio, a quien el kirchnerismo (peronismo de centroizquierda) señalaba como un operador de la oposición que politizaba las causas judiciales durante la presidencia de Cristina Kirchner (2007-2015).
Fernández fue jefe de Gabinete en la última etapa del gobierno de Kirchner, a quien sucedió el presidente Mauricio Macri, de una alianza de centroderecha. Fernández perdió las elecciones a gobernador ante la macrista María Eugenia Vidal.
"No tengo ninguna duda de que la apelación me va a dar la razón. El plan fue lanzado antes de que yo asumiera (en el gabinete). Es un programa muy bueno. Le permitía satisfacer necesidades básicas a las familias", se defendió Fernández en declaraciones a radio Del Plata.
Bonadío ha dictado procesamientos contra el exvicepresidente Amado Boudou, entre decenas de exfuncionarios, e incluso investiga a la expresidenta por presuntas irregularidades con los hoteles de su propiedad en la Patagonia (sur).
El encausamiento de Fernández se debe a una sospecha de manejos poco claros de fondos en el llamado Plan Qunita, que entregaba en barrios marginales ropa de bebé, cunas, medicamentos, pañales y otros productos útiles para mujeres a punto de dar a luz.
También quedó involucrado en la causa el exministro de Salud Juan Manzur, ahora gobernador de Tucumán (norte).
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