Ankara, 22 mar.- El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, ha asegurado que los rebeldes del ilegal Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) no serán atacados durante su retirada de Turquía, informa hoy la prensa local.
"No seremos quienes desencadenen estos asesinatos. No lo permitiremos. Queremos que todo se resuelva de manera que sirva a la paz del país", señaló el mandatario anoche a un grupo de periodistas turcos durante su retorno a Turquía desde Holanda.
Abdullah Öcalan, el líder encarcelado del PKK, había anunciado ayer mediante un comunicado que el grupo rebelde dejará las armas y se retirará del territorio turco, sobre todo hacia regiones kurdas colindantes de Siria e Irak.
Öcalan también le pidió al Parlamento de Turquía que se responsabilice de este proceso.
Erdogan declaró que el Parlamento no tenía nada que ver en el proceso de retirada de los proscritos, pero que, no obstante, el Gobierno hará lo que tenga que hacer.
El primer ministro añadió que no permitiría que el PKK convirtiera este proceso en una suerte de espectáculo, pero que tampoco iba a consentir ataques militares contra los sublevados que se retiren, como ocurrió en treguas pasadas.
Según Erdogan, los guerrilleros del PKK que deciden retirarse podrán ir a donde quieran, aunque subrayó que Ankara no tolerará durante este proceso la legitimación del PKK, un grupo considerado terroristas por Turquía, Estados Unidos y la Unión Europea.
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