Estado brasileño de Santa Catarina sufre séptima madrugada seguida de ataques

  • Dos comisarías y las residencias de cinco policías fueron tiroteadas hoy en siete ciudades durante la séptima madrugada consecutiva de ataques violentos en Santa Catarina, estado del sur de Brasil, según fuentes oficiales.

Río de Janeiro, 3 oct.- Dos comisarías y las residencias de cinco policías fueron tiroteadas hoy en siete ciudades durante la séptima madrugada consecutiva de ataques violentos en Santa Catarina, estado del sur de Brasil, según fuentes oficiales.

Los nuevos atentados elevan a 62 el número de ataques violentos contra instalaciones policiales, establecimientos comerciales y autobuses públicos registrados en 26 ciudades de este estado fronterizo con Argentina desde el viernes de la semana pasada.

La ola de ataques, que ha dejado al menos tres muertos y 24 autobuses incendiados, es atribuida por las autoridades regionales a un grupo criminal que domina las cárceles en Santa Catarina en represalia a operaciones contra el tráfico de drogas.

Se trata de la tercera ola de ataques similares registrada en Santa Catarina en los últimos dos años y atribuida a la organización criminal regional dirigida desde las prisiones.

Grupos de desconocidos tirotearon en la madrugada una comisaría de policía en la ciudad de Joinville, una de las mayores ciudades del estado, a 180 kilómetros de Florianópolis, la capital regional, y otra en el municipio de Lages.

Los ataques a residencias de policías se registraron en Florianópolis, Gaspar, Sao José, Palhoça y Bigauçu.

Según el gobierno regional, que por ahora descarta la necesidad de solicitar refuerzos de la Fuerza Nacional de Seguridad para hacer frente a la ola de violencia, ya han sido detenidos 43 acusados de actos violentos, de los cuales nueve menores de edad.

La gobernación de Santa Catarina también descarta la posibilidad de flexibilizar las operaciones que viene realizando para combatir el tráfico de drogas en esta región del sur de Brasil y a las cuales son atribuidos los ataques.

Además de anticipar la entrada en vigor de las medidas de seguridad que estaban previstas para las elecciones presidenciales del domingo en Brasil, la gobernación anunció el traslado a prisiones de otros estados de presos que cumplen pena en Santa Catarina y que son señalados como los promotores de los atentados.

La ola de violencia ha obligado a las empresas de transportes a retirar los autobuses de las calles en horarios nocturnos y a los comerciantes a cerrar sus puertas más temprano que lo habitual.

Mostrar comentarios