Fernández y Martelly le apuestan a educación para garantizar futuro de Haití

  • El presidente dominicano, Leonel Fernández, y su homólogo haitiano, Michel Martelly, apostaron hoy por la educación para garantizar el futuro del deprimido Haití, que todavía trata de recuperarse del devastador terremoto que asoló gran parte de su territorio hace justamente dos años.

Marta Florián

Lemonade (Haití), 12 ene.- El presidente dominicano, Leonel Fernández, y su homólogo haitiano, Michel Martelly, apostaron hoy por la educación para garantizar el futuro del deprimido Haití, que todavía trata de recuperarse del devastador terremoto que asoló gran parte de su territorio hace justamente dos años.

Fernández entregó hoy a su par haitiano en la localidad de Lemonade, en el norteño departamento de Cabo Haitiano, una universidad que su Gobierno prometió al vecino país tras el sismo y que acogerá hasta a 10.000 estudiantes en diferentes tandas.

Con un coste de 30 millones de dólares, la Universidad Henri Christophe consta de cuatro edificios y 72 aulas, biblioteca, laboratorio científico, sala de reunión, centro de informática, área de enfermería, un auditorio, una cafetería, entre otros, según detalló Fernández en un multitudinario acto en el recinto educativo.

La donación, afirmó Fernández, "es un acto de amor y una aspiración de progreso y bienestar para el pueblo haitiano", de parte de la República Dominicana donde vive, según distintas fuentes, alrededor de un millón de haitianos, la mayoría sin documentos.

Pero también es un gesto de solidaridad "que se nutre de sensibilidad y el deseo de los dominicanos de contribuir a la reconstrucción de Haití", agregó el mandatario en presencia de Martelly, de las esposas de ambos y de ministros de ambos países, que comparten la isla caribeña de La Española.

"La mayor riqueza de Haití es su gente, y sobretodo su juventud estudiosa y de gran talento", subrayó Fernández, en el que fue declarado "ciudadano honorable" por parte del alcalde de la localidad, Jean Delavoix Manguira.

El gobernante expresó hoy su esperanza de que la comunidad internacional pueda cumplir con las promesas que hizo a Haití, la nación más pobre de América, tras el terremoto del 12 de enero de 2010 que dejó más de 300.000 muertos, un número similar de heridos, y 1,5 millones de damnificados.

A su turno, Martelly, quien asumió la Presidencia 16 meses después de la tragedia, agradeció el gesto de Fernández y lo calificó de "hermoso regalo".

"Inaugurar una universidad es un gesto estimulante para un jefe de Estado. Es abrir una nueva puerta al porvenir", argumentó el presidente de Haití en presencia, además, de la enviada especial de la Unesco para Haití, la exgobernadora de Canadá de ascendencia haitiana, Michaelle Jean, y del exgobernante panameño Martín Torrijos.

Este centro, construido sobre 144.000 metros cuadrados, formará parte de la Universidad del Estado de Haití (UEH), cuyo rector, Jean Vernet Henry, subrayó la importancia de que el Gobierno de su país privilegie el sector educativo.

"La educación tiene que ser una prioridad", apuntó el académico haitiano, quien explicó que la decisión de construir la nueva universidad en la zona norte del país se debe a los planes de descentralizar la UEH.

En el acto se presentó un documental que recogió duros momentos de la tragedia causada por el sismo, así como el inicio de los trabajos de construcción del recinto educativo donado por el Gobierno dominicano.

Tras esta actividad, el presidente Fernández se trasladó a Puerto Príncipe para inaugurar la nueva sede de la embajada de su país, que resultó seriamente afectada por el fenómeno.

Mostrar comentarios