El Consejo de Ministros aprobó este viernes el Programa de Estabilidad 2016-2019, que recoge una nueva senda de consolidación fiscal y la actualización del cuadro macroeconómico, y el Plan Nacional de Reformas para el presente ejercicio.
La vicepresidenta del Gobierno en funciones, Soraya Sáenz de Santamaría, dijo que el crecimiento económico es “sano” y que España sigue ganando “competitividad”.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la vicepresidenta defendió que “si se hacen las cosas bien, España tendrá 20 millones” de personas trabajando a finales de 2019.
Junto a la vicepresidenta comparecieron el titular de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, y el de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, que detallaron el contenido de ambos documentos, que remitirá ahora a la Comisión Europea.
Sáenz de Santamaría quiso dejar claro que los principales objetivos son el crecimiento económico y la creación de empleo “de calidad”.
La 'número dos' del Ejecutivo expuso las líneas generales del Plan Nacional de Reformas 2016, entre los que se encuentran medidas relacionados con la reforma de la financiación autonómica o la racionalización de la Administración. Así, apuntó que se trata de presentar “reformas futuras” para mantener el ritmo crecimiento y la creación de empleo.
El Gobierno en funciones ha planteado una nueva senda de consolidación fiscal, que recoge unos objetivos de déficit del 3,6% del PIB este año y del 2,9% en 2017.
De esta manera, se relaja la actual senda, que fijaba un déficit público del 2,8% en 2016 y del 1,4% en 2017. Esto supone, además, que España tiene un año más para reducir el déficit por debajo del 3%, barrera para salir del Procedimiento de Déficit Excesivo (PDE) de la Comisión Europea.
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